Puesto fronterizo “Complejo Carranza” en Horcones.
Puente del Inca, Mendoza.

En el puesto fronterizo “Complejo Carranza” en Horcones, Puente de Inca, Mendoza, la temperatura puede llegar en verano y por la noche a dos grados. El número de usuarios que circulan por la frontera aumenta considerablemente en época estival: se estima el paso de 92 mil personas, cuando en invierno, si no hay corte ruta por razones climáticas, llegan en promedio a 30 mil.

Por eso Luis Fernández junto a otros cuatro agentes cubren las 24 horas del día en turnos de doce horas. Hace nueve años que trabaja en el puesto de Horcones, y eso implica trasladarse 90 kilómetros desde Uspallata, donde vive, para permanecer y trabajar una semana en la montaña.

"Luis cuenta que este trabajo es lo que siempre esperó en la vida porque le gusta estar en la montaña: acá conocés gente que te enseña otras cosas de la vida."

Luis Fernández

Luis cuenta que este trabajo es lo que siempre esperó en la vida porque le gusta estar en la montaña: “acá conocés gente que te enseña otras cosas de la vida. Tenemos relación, en general, con los usuarios que nos visitan por turismo, en colectivos, autos, combis, mochileros a pie. Hacemos control vehicular y de mascotas. También controlamos cargas comerciales en camiones”.

Sostiene que el Senasa te brinda posibilidades de estudio, a través de distintas capacitaciones para los temas que son de su incumbencia como: barreras, zoonosis, sanidad animal, vegetal. Luis espera seguir progresando y poder capacitarse en el tema de fronteras.