DEL VALLE Tradición, innovación y un legado que trasciende fronteras
En el corazón de la localidad de San Fernando, Buenos Aires, late una historia que combina tradición, innovación y pasión por una bebida que desde hace más de 70 años une generaciones: la sidra.
Bodegas Cuvilier S.A., con su emblemática marca Del Valle, no solo lidera el mercado argentino, sino que también alcanza destinos internacionales. Martín Bosch, gerente de compras y comercio exterior de la empresa, nos abrió las puertas a este universo donde cada botella cuenta una historia de esfuerzo, visión y amor por la calidad.
La historia de Del Valle comienza en 1957, cuando Luis Virginio, un emprendedor incansable nacido en la ciudad bonaerense de Pergamino, decidió transformar su conocimiento sobre la venta de envases de sidra en algo mucho más ambicioso: la creación de su propia sidra. Inspirado por el potencial de las tierras de Río Negro, fundó una fábrica de caldo de sidra, apostando por la mejor manzana del país para elaborar un producto único.
Desde aquellos viajes interminables entre Buenos Aires y la Patagonia, Virginio entendió que la clave del éxito residía en la constante mejora de los procesos productivos. Nunca escatimó en invertir en maquinaria de última tecnología, posicionando a Del Valle como la fábrica de sidra más grande del país. Sus tanques pueden albergar hasta un millón de litros.
Hoy, bajo el liderazgo de sus tres hijos, la empresa mantiene vivo ese espíritu innovador y sigue siendo referente indiscutido en la industria. Del Valle no solo se destaca en el mercado local; su impacto trasciende las fronteras. Desde Paraguay y Uruguay hasta Estados Unidos, la sidra argentina conquista paladares debido al compromiso inquebrantable con la calidad.
La excelencia se logra en equipo y Del Valle lo sabe bien. La especialista Marcela Andrea Álvarez, a cargo de la Dirección Técnica de Servicios Analíticos del INTI, explica que la empresa encontró en el Instituto la asistencia y el soporte clave para cumplir con las exigencias internacionales. Desde el análisis de la graduación alcohólica hasta estudios de acidez volátil, el trabajo conjunto ha sido fundamental para garantizar estándares de calidad necesarios para conquistar nuevos mercados.
“El INTI es para nosotros el organismo argentino más reconocido, y eso nos da confianza cuando los compradores del exterior requieren certificaciones oficiales”, comenta Bosch.
El mercado global de sidra está proyectado a crecer significativamente hasta 2031, impulsado por la innovación en sabores y la preferencia de los consumidores por bebidas con bajo contenido alcohólico. Fuente: The Insight Partners
Con productos que van desde la clásica línea Del Valle hasta las innovadoras sidras premium de las marcas “1930” y “Pyrus”, la empresa ofrece una variedad que cautiva a consumidores con gustos diversos, destacándose también por sabores originales como sidra de pera y las versiones saborizadas de ananá, fresa y durazno. “Somos los únicos en Argentina que pasteurizamos nuestra sidra, lo que asegura que su sabor se mantenga intacto sin importar el destino”, explica Bosch. Este método único, combinado con más de 25 años de experiencia exportadora, convierte a Del Valle en sinónimo de confianza y excelencia. Del Valle no es solo una sidra; es un símbolo de la historia y la evolución de una industria. El producto refleja una empresa que combina lo mejor de la naturaleza con décadas de experiencia e innovación.
Con una presencia que se expande hacia nuevos horizontes, como Brasil, Japón y Europa, Del Valle sigue llevando el sabor argentino al mundo.
La sidra es el resultado de un proceso cuidado al detalle, desde la molienda de las mejores manzanas hasta el envasado final en su planta de San Fernando. Por ello, cuando se elige Del Valle, no solo se disfruta de un producto inigualable, sino de una marca que lleva más de siete décadas siendo líder en el país y 25 años destacándose en el exterior. Una marca que no solo innova, sino que honra un legado que sigue inspirando a nuevas generaciones.
Bodega Cuvillier S.A.
Producción de sidra
- Planta productiva: 8000 m2
- Capacidad productiva: 12.000 botellas hora 12.500 latas hora de 473 ml
• POSICIÓN ARANCELARIA (NCM):
-2206.00.10.000B / Sidra. Las demás bebidas fermentadas (por ejemplo sidra, perada, aguamiel); mezclas de bebidas fermentadas y mezclas de bebidas no alcohólicas, no expresadas ni comprendidas en otra parte.
Más información en:
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Gerencia de Relaciones Institucionales y Comunicación.
Subgerencia Operativa de Relaciones Institucionales