El Gobierno Argentino dona al pueblo de Ecuador una obra del General José de San Martín, realizada por Alejandro Marmo
El ministro de Cultura, Tristán Bauer, viajó especialmente a Guayaquil para participar las jornadas de conmemoración del Bicentenario del Encuentro de los Libertadores, que se celebra entre el 25 y el 29 de julio, en la República del Ecuador.
Entre el 25 y el 29 de julio se lleva adelante en la República del Ecuador la semana del Bicentenario del Encuentro de Guayaquil, en la que se realizan distintas actividades para conmemorar esta fecha fundamental en la historia de la región. Como ofrenda a los festejos de este bicentenario, y por pedido del país hermano, el gobierno argentino entregará una obra del General San Martín del destacado escultor argentino Alejandro Marmo. A su vez, y como parte del intercambio de ofrendas, Guayaquil le hará entregará al Ministro de Cultura, Tristán Bauer, de la llave de la ciudad
Esta conmemoración busca promover y destacar la importancia política, histórica y cultural del encuentro entre dos Libertadores que reunió al General José Francisco de San Martín y el General Simón Bolívar un 26 de julio de 1822 en la ciudad de Guayaquil. Este fue el único sitio que encontró a los dos héroes de la independencia sudamericana con el propósito de definir el futuro geopolítico de la región. De ahí la importancia de esta fecha y de este lugar.
Ofrenda a la ciudad de Guayaquil en el 200° aniversario del encuentro entre San Martín y Bolívar
El homenaje a este hecho histórico tiene lugar en la ciudad de Guayaquil, donde se encuentra presente el ministro de Cultura, Tristán Bauer, junto al presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano, Eduardo García Caffi, y tiene el objetivo de enaltecer los fundamentales valores de igualdad y libertad entre los pueblos de América del Sur y celebrar la relación de hermandad entre Argentina y Ecuador. En ambos países este acontecimiento es de suma importancia para profundizar aún más los profundos lazos políticos, culturales, económicos y turísticos existentes.
"Esta ofrenda representa el inmenso orgullo que sentimos por conmemorar los doscientos años de este hecho histórico y fundamental para la región: el encuentro entre nuestros dos máximos libertadores. Dos figuras trascendentales, protagonistas indiscutibles de nuestra historia, que lucharon contra el colonialismo por la libertad y buscaron la felicidad de nuestros pueblos. Como sostiene el Papa Francisco, aquel sueño de San Martín y Bolívar es una profecía.
La obra "San Martín Iluminado", del artista argentino Alejandro Marmo que será emplazada en Guayaquil, tiene el valor de un símbolo, el símbolo de la hermandad de nuestros pueblos para la construcción de un futuro más hermoso en nuestra América unida". Tristán Bauer
Como parte de estas celebraciones también se ofrece un ciclo de cine argentino con contenidos alusivos de Canal Encuentro y Paka Paka, y la proyección de la película Revolución. El cruce de Los Andes, de Leandro Ipiña. También se expondrá una muestra histórica en el Museo Naím Isaías sobre la vida y obra de los Generales José de San Martín y Simón Bolívar que tiene el objeto de transmitir el legado de estos héroes históricos en su paso por Guayaquil, su influencia político-militar y aspectos destacados de su vida. Serán exhibidos objetos, obras de arte, réplicas de los uniformes y sables, entre otros bienes culturales.
Sobre el artista Alejando Marmo
Nació el 19 de febrero de 1971 en Caseros, Provincia de Buenos Aires, Argentina, dentro de una familia de inmigrantes conformada por su padre italiano y su madre griega, descendiente de armenios.
En la herrería de su padre adquirió el gusto por el arte que desarrollaría con continuidad y de forma autodidacta a partir de los 20 años. A mediados de la década del noventa, cuando el sistema industrial se estaba desmantelando en la Argentina, el artista creó el proyecto “Arte en las Fábricas” instalando así el concepto de integración a través del arte, como metáfora del desarrollo cultural e industrial.
Murales de Evita
La máxima expresión de “Arte en las Fábricas” se cristalizó en los murales de Evita. Se trata de una idea de Alejandro Marmo que nació en 2006 y fue concretada en 2011 con el emplazamiento de las obras en las fachadas norte y sur del ex edificio de Obras Públicas actual edificio del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación Argentina, ubicado en la Avenida 9 de Julio entre Moreno e Independencia. Los murales, realizados con material emblemático de la industria como el acero corten y construidos con la participación de obreros, se proponen reivindicar la figura de Evita como ícono cultural y de identidad nacional.
En 2010 la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo oficializó al incorporarlo como intervención artística en el decreto 329/10 que declaró a Eva Perón Mujer del Bicentenario, reconociendo la idea de Marmo.
Desde entonces, son numerosas las réplicas de los murales de Evita inauguradas en distintas ciudades del país, desde Los Toldos, en la casa natal de Eva, hasta en el barrio Padre Mugica (ex Villa 31), en el barrio Padre Ricciardelli (ex Villa 1-11-14), en la Estación José León Suárez y en la fachada del Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas, en El Palomar, Provincia de Buenos Aires. A propósito del centenario del nacimiento de Eva, en 2019, la réplica llegó al museo Evita en CABA. En 2021, se instaló la Evita más austral de la Argentina, la “Evita del fin del mundo” en la ciudad de Ushuaia, Tierra del Fuego.
Con su iniciativa, llevó el arte a espacios productivos de trabajo con el propósito de rescatar el rezago de las fábricas abandonadas del conurbano bonaerense para transformarlo en esculturas, con la colaboración de obreros y sectores excluidos de la sociedad.
Las obras que resultan de este tipo de experiencias son emplazadas en espacios públicos dado que para el artista es ahí donde toman verdadera dimensión, al mismo tiempo que los creadores refuerzan su sentido de pertenencia con el trabajo artístico realizado. Esta forma de entender y desarrollar el arte apunta a valorar el mundo imaginario del hombre común, de modo tal que quienes participan del proyecto crean en sí mismos, al comprobar que lo que se proyecta desde la imaginación puede concretarse.
La transformación de lo despreciable en belleza es otro de los conceptos que rige la obra de Alejandro Marmo. El artista cuenta con una fructífera producción de esculturas y pinturas realizadas a partir de desechos, rezagos industriales y material de descarte.