La aparición de malezas resistentes como Amaranthus hybridus en los últimos años ha motivado la búsqueda de soluciones integradas que incluyan el uso de herbicidas pre-emergentes y post-emergentes, así como la incorporación de cultivos de cobertura en la rotación agrícola. Estas estrategias no solo actúan como competidores naturales de las malezas, sino que también ofrecen beneficios adicionales para el suelo y el cultivo en general.

El INTA, desde el grupo de investigación de cultivos extensivos de la Estación Experimental Agropecuaria de Santiago del Estero, se encuentra investigando sobre esta temática con un proyecto local titulado “Desarrollo de estrategias químico/culturales para el control de malezas resistentes en el cultivo de algodón para el área de riego del Rio Dulce en Santiago del Estero”.

El fundamento de estas líneas de acción, es la demanda constante por parte de productores y un ejemplo de ello se ven reflejada en encuesta y trabajos de relevamiento a campo que se presentan en este informe.

Los resultados de esta encuesta ponen en evidencia la necesidad de seguir profundizando en el trabajo conjunto entre los productores, asesores y técnicos de los sectores públicos para mejorar el manejo de malezas en los sistemas productivos de algodón. Si bien una proporción significativa de los productores ya ha adoptado estrategias como el uso de herbicidas preemergentes y los cultivos de cobertura, todavía queda un margen importante de mejora para ampliar estas prácticas y asegurar su correcta implementación.

El uso de herbicidas preemergentes ha demostrado ser una herramienta clave para reducir la competencia de malezas desde las primeras etapas del cultivo, disminuyendo la presión que estas ejercen sobre los sistemas productivos. Sin embargo, su efectividad puede potenciarse en combinación con otras estrategias, como los cultivos de cobertura, que no solo ayudan a prevenir la aparición de malezas, sino que también reducen la erosión y aportan materia orgánica.

El rol de las instituciones públicas en la difusión de estas prácticas, junto con el apoyo del sector privado en la provisión de insumos y tecnología, puede ser determinante para encontrar soluciones y validar estrategias que podrían beneficiar a la cadena productiva algodonera de la provincia.

Puede descargar el informe completo desde el link de abajo.