La diplomatura en Acceso a la Justicia es una propuesta de formación diseñada en conjunto por la Dirección Nacional de Promoción y Fortalecimiento para el Acceso a la Justicia del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y la Facultad de Humanidades, Ciencias Sociales y de la Salud de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (UNSE), destinada específicamente al personal administrativo y a promotoras y promotores territoriales incorporados a los Centros de Acceso a la Justicia (CAJ) de todo el país.

La primera edición de esta capacitación contó con la inscripción de más de 200 personas, de los cuales 60 son trabajadores/as de la cartera de Justicia y Derechos Humanos y 130 son promotores territoriales que prestan servicio en los 106 CAJ del Ministerio en todo el país.

“Esta Diplomatura nos ayuda a construir y ser parte de ese Estado con el que todos soñamos. La jerarquización y profesionalización continua de los trabajadores que trabajan en los Centros de Acceso a la Justicia garantiza ampliar y garantizar el derecho que todos los argentinos y argentinas tenemos de acceder a la justicia y hacer valer sus derechos”, señaló el ministro Soria en la ceremonia realizada en el auditorio del Registro de la Propiedad Inmueble.

El curso fue inaugurado por el ministro Soria y el rector de la UNSE, Héctor Paz, en mayo de 2022. La formación profesional en acceso a la justicia tiene una duración total de ocho meses, organizados en seis módulos que constan de cuatro encuentros sincrónicos y actividades asincrónicas que se desarrollarán a través de una plataforma virtual. Al finalizar, los alumnos y alumnas tienen un encuentro integrador con tutor/a para orientar la articulación de los contenidos a la experiencia comunitaria cotidiana.

El cuerpo docente está compuesto por profesionales de excelencia en la defensa de los Derechos Humanos con vasta experiencia en políticas públicas vinculadas al tema y con un fuerte compromiso con procesos de transformación social.

El objetivo de la formación es consolidar la experiencia adquirida en el trabajo cotidiano y está dirigida a quienes constituyen la puerta de entrada al acceso a derechos de las personas consultantes, mayoritariamente población en situación de vulnerabilidad que habita barrios populares. Propone jerarquizar y formalizar académicamente los saberes adquiridos en la experiencia laboral cotidiana promoviendo una mirada reflexiva.