Suministro de nitrógeno en soja ¿Fijación biológica o fertilización química?
La soja es el cultivo con mayores requerimientos unitarios de Nitrógeno (N). Como en el resto de las Fabáceas, la magnitud de esta demanda determinó el desarrollo de un complejo mecanismo adaptativo, la fijación biológica de N (FBN), mediante la simbiosis con las bacterias del género Bradyrhizobium, siendo las especies prevalentes Bradyrhizobium japonicum (Bj) y Bradyrhizobium elkanii (Be). Sin embargo, la inquietud persiste: ¿la provisión de una fuente externa podría incrementar los rendimientos? Almeida et al., (2023) sugieren que el proceso, al demandar un alto costo energético, termina perjudicando otros mecanismos vitales como fijación de vainas y el llenado de granos.
El efecto sería más pronunciado en cultivos de alto rendimiento, bajo riego o en condiciones de suelo y manejo optimizadas. Por el contrario, Zilli et al.,(2021) enfatizan en que la FBN es altamente regulada, y que la planta asimila todo lo que necesita para su buen rendimiento.
El objetivo de este experimento fue comparar, durante cuatro campañas, el resultado en calidad de nodulación y rendimiento de la inoculación con bacterias de Bj y Be, en comparación con una fuente química tradicional, en sitios con antecedente de soja previa. La hipótesis sugiere que la inoculación resulta un método eficaz y suficiente para el abastecimiento de N en el cultivo de soja, no presentando diferencias en rendimiento con la fertilización química.