Las celdas solares basadas en materiales III-V (compuestos formados por elementos de la columna III y la V de la tabla periódica), debido a su alta eficiencia de alrededor de un 30%, se utilizan casi con exclusividad para la generación de potencia eléctrica en satélites. En los últimos años, debido a su potencialidad, se introdujo también en aplicaciones terrestres con concentración resultando en eficiencias de conversión superiores al 45% a nivel laboratorio.

Para desarrollar tecnología propia en este campo, la CNEA espera contar en breve con un equipo de MOCVD que permitirá la obtención de crecimientos epitaxiales propios y así establecer los primeros pasos para la introducción de la tecnología de celdas solares III-V y multijunturas en el país.

Asimismo, el Departamento Energía Solar trabaja en la implementación de técnicas de caracterización específicas de estos dispositivos como Curvas I-V (corriente-tensión), respuesta espectral, DLTS (Deep Level Transient Spectroscopy), medición de trasmitancia/reflectancia, vida media de portadores minoritarios y electroluminiscencia.