Comunicación responsable en temas de consumo de alcohol
La publicación “Recomendaciones para el tratamiento de temas de Salud Mental en los medios” es una herramienta de trabajo para orientar y proporcionar recursos a la hora de comunicar sobre salud mental y adicciones, desde una mirada integral, promoviendo un tratamiento mediático con información adecuada y actualizada, libre de estigmas y sin discriminación
Recomendamos leer esta guía en su totalidad y tener en cuenta los siguientes contenidos prioritarios:
Además de publicar noticias relacionadas con la problemática del alcohol, tales como estadísticas, la relación entre alcohol-lesiones / alcohol-violencia y el consumo adolescente, resultaría beneficioso y deseable que los medios informaran siguiendo algunas pautas claras en el tratamiento del tema.
Claves para buenas prácticas de comunicación en el tratamiento de consumo de alcohol:
Es importante saber y difundir que las bebidas alcohólicas son sustancias psicoactivas que tienen la propiedad de generar cambios en nuestro organismo tales como modificar el ánimo, la memoria, el pensamiento, las sensaciones y la voluntad. El vínculo que se constituye con una sustancia como el alcohol es subjetivo, por eso una persona no responde de igual manera que otra ante la misma bebida.
Los efectos de las bebidas alcohólicas dependen de las características que le son propias; el grado de alcohol puro que posea la bebida; si la persona ingirió alimento o no; del contexto donde se consume; del género, expectativas, estado de ánimo, características psicológicas y corporales de quien la consume. También dependen de la cantidad, frecuencia y velocidad de la ingesta; y de otros factores tales como enfermedades pre-existentes; la mezcla con otras bebidas alcohólicas y/o otras drogas.
Tratamiento mediático: Para tener en cuenta
INFORMACIÓN. Trabajar con información adecuada marcando la diferencia entre “alcoholismo”, caracterizado por un estado cuyos indicadores son la tolerancia y la dependencia a la sustancia; y el “consumo episódico excesivo de alcohol”, caracterizado por la ingesta de gran cantidad de alcohol en un período corto de tiempo que genera embriaguez o borrachera . Brindar información sobre los lugares a los cuales recurrir en cada localidad, los teléfonos a los que llamar y sobre el derecho a la atención en situaciones de consumo problemático.
CONTENIDO E IMÁGENES. Evitar asociar desde el contenido y las imágenes el consumo de alcohol con la diversión y el éxito. Sobre todo en situaciones de nocturnidad. De ser posible no mostrar vasos, ni personas alcoholizadas.
PREJUICIOS. Desarmar y desestigmatizar las construcciones que asocian a los jóvenes de sectores populares con el consumo de alcohol y la violencia.
RESPONSABILIDAD SOCIAL. Aconsejar a padres y adultos responsables a no ser cómplices del consumo excesivo de alcohol de los jóvenes en las “previas”. Por ejemplo, los adultos pueden estar presentes en ese momento aportando comida, hablando con los jóvenes y no dejándolos solos. Además, es fundamental el compromiso de los comerciantes a no vender alcohol a menores de edad. En resumen, informar en función de lograr comprometer a toda la comunidad a trabajar juntos para concientizar sobre los riesgos del consumo excesivo de alcohol tanto para los jóvenes como para los adultos.
VIALIDAD. Promover la figura del conductor responsable y el uso de transporte público, o medios alternativos, si se va a tomar alcohol.
NO AL ESTIGMA. En caso de producirse acontecimientos que estén relacionados con el alcohol, como violencia, accidentes u otros, no estigmatizar al consumidor, tratando de evitar centrarse sólo en la dimensión espectacular del hecho y reflexionar sobre el problema socio sanitario que implica el consumo excesivo.
FECHAS ESPECIALES. En vísperas de festejos incluir recomendaciones respecto al uso responsable de alcohol y alertar sobre el uso nocivo, el cual incluye consumo regular de riesgo, consumo episódico excesivo, intoxicación etílica, dependencia instalada (adicción) al alcohol.