Ficha del área protegida
Provincia: Corrientes
Ecorregión: Esteros del Iberá
Superficie: 17.086 ha
Creación: 2001 (Ley N° 25.447/01)
Esta área protegida tiene una alta biodiversidad ya que cuenta con especies del Espinal, el Chaco Húmedo y la Selva Paranense. Se ubica dentro de la gran depresión del Iberá, alimentada principalmente por las lluvias.
En la zona central del Parque se desarrollan sabanas abiertas con pastizales y palmares de yatay, salpicadas de bosquecillos de laurel y timbó. Allí viven aves amenazadas como el yetapá de collar o la monjita dominicana.
Hacia el norte se encuentran las cañadas Fragosa y Portillo y hacia el sur el estero de Santa Lucía, donde prospera vegetación de ambientes inundables.
Entre las cañadas emergen lomadas donde crecen los bosques de quebrachos y algarrobos. Las características lagunas circulares, formadas por acción del viento sobre el suelo arenoso, congregan una gran variedad de aves como garzas, golondrinas y macaes. Carpinchos, zorros de monte, corzuelas y aguará popés son algunos de los mamíferos más vistos, pero también viven otros amenazados de extinción como el aguará guazú o el ciervo de los pantanos.
Entre sus rarezas se destaca la presencia de un pez pulmonado que puede respirar aire, adaptación que le permite sobrevivir a períodos de sequía. Y como endemismo de la región la presencia de la ranita de Pedersen que habita en los bosques de zonas más secas del parque.
Emblema
El yacaré negro (Caiman yacare) es uno de los reptiles más grandes de nuestro país. Posee un cuerpo robusto con una piel extremadamente dura y cubierta de escamas. Es un experto nadador y se alimenta de peces como la piraña, que atrapa con su gran hocico repleto de dientes afilados. Para regular su temperatura, alterna baños de sol y zambullidas bajo el agua. Sus ojos, orificios nasales y oídos se encuentran alineados en su cabeza y son lo único que sobresale del agua cuando nada.
El mburucuyá (Passiflora caerulea) es una enredadera que con sus enroscados zarcillos se trepa a otras plantas en busca de luz. Sus hojas verdes palmadas semejan una mano. Secreta un líquido azucarado que atrae hormigas que la defienden de otros insectos. La gran flor que produce es compleja y tiene unos filamentos violáceos con base amarilla. El fruto, dulzón, globoso y anaranjado es muy buscado por las aves, que contribuyen con la dispersión de sus semillas.