Recomendaciones del ministerio de Salud de la Nación ante la ola de calor
En vistas al potencial impacto en la salud de las altas temperaturas, el ministerio de Salud de la Nación emite una serie de recomendaciones a tener en cuenta, dirigidas a toda la población y, en especial, a los grupos de riesgo.
El Servicio Meteorológico Nacional prevé una ola de calor (período en el cual las temperaturas máximas y mínimas superan, por lo menos durante 3 días consecutivos y en forma simultánea, ciertos valores que dependen de cada localidad) que se experimentará en parte del territorio nacional.
Se verán afectadas con alerta naranja localidades de Buenos Aires, San Luis, La Pampa, Corrientes, Misiones, Mendoza y Ciudad de Buenos Aires. En tanto hay alerta amarillo en algunas jurisdicciones de Buenos Aires, San Juan, Mendoza, La Pampa, Córdoba, Corrientes y Entre Ríos.
Una ola de calor es un período excesivamente cálido de estas características puede tener un impacto en la salud de leve a alto sobre todo para grupos de riesgo (niños y niñas, adultos mayores de 65 años con enfermedades crónicas como cardiovasculares, respiratorias, diabetes y obesidad). Los efectos van desde deshidratación, golpes de calor o complicaciones hasta un aumento de la mortalidad.
El Ministerio de Salud de la Nación recomienda especial cuidado con personas mayores, bebés, niños y niñas, personas embarazadas y en lactancia, personas con alguna enfermedad crónica o con sobrepeso, personas expuestas al calor en su ambiente laboral, quienes viven en situación de calle, y aquellas personas que consideren que pueden estar más expuestos por el impacto de la ola de calor. En este sentido sugiere se tomen algunas precauciones necesarias según el caso.
Las recomendaciones en lugares cerrados (casa, trabajo, otro) para evitar un golpe de calor son: hidratarse, tomar agua con mayor frecuencia (aun cuando no se sienta sed), y procurar siempre consumir agua segura, evitar bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes. También es recomendable incorporar frutas y verduras a la alimentación y evitar las comidas abundantes y así como realizar actividad física intensa.
Para el cuidado de la salud en la vía pública se sugiere evitar la exposición directa al sol en los horarios de mayor temperatura (de 10 a 16 horas), en especial bebés, niñas pequeñas y niños pequeños. Además, es importante utilizar protección solar, mantenerse hidratado y consumir agua segura con mayor frecuencia (aun cuando no se sienta sed).
Asimismo, se recomienda prestar atención a signos como: sed intensa y sequedad en la boca, temperatura corporal mayor a 39º C, sudoración excesiva, sensación de sofocación, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos, dolores de cabeza, entre otros.
Con respecto a las niñas y los niños es conveniente ofrecerles continuamente líquidos, preferentemente agua o jugos naturales, sin esperar a que los pidan. En el caso de lactantes es recomendable darles el pecho de manera más frecuente. Respecto a la vestimenta, procurar que vistan con ropa holgada, liviana, de algodón y de colores claros, bañarlos y/o mojarles el cuerpo con frecuencia, evitar que se expongan al sol, especialmente de 10 a 16 horas. En todo momento es recomendable colocarles gorro y protector solar y mantenerlos en lugares bien ventilados o con aire acondicionado (ya sea en una casa o en lugares públicos).
En bebés, es importante asegurarse de que la piel no se encuentre muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal.
En relación a las personas adultas mayores, mientras dure la ola de calor se sugiere no salir a la calle sin compañía y en caso de sentirse mareado o muy afectado por las altas temperaturas se debe prescindir de salir al exterior para que el calor no refuerce negativamente la sintomatología.
Para más información: http://www.argentina.gob.ar/salud/verano/olas-de-calor