El subsecretario de Justicia y Política Criminal, Juan José Benitez, presentó el último informe del Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena (SNEEP). De las cifras expuestas surge que por segundo año consecutivo hubo más personas privadas de su libertad con condena firme que procesadas: el 54,4% de las personas detenidas en todo el país tienen condena. Se revirtió así, y por segundo año consecutivo, una tendencia histórica de la Argentina, ya que entre 2002 y 2015 fue al revés.

Este informe del SNEEP es el número 16 desde que, en 2002, se empezó a confeccionar, y cuenta con datos relativos hasta el 31 de diciembre de 2017.

Los principales números señalan que la población alojada en las cárceles de todo el país era de 85.283 (más 6.878 detenidos en comisarías o destacamentos). También indica que en todo el territorio argentino existen 301 unidades de detención: 54 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), 32 del Servicio Penitenciario Federal (SPF) y 215 del resto de las provincias.

Benitez destacó que el informe “es la estadística más prolongada en la materia, casi sin precedentes no sólo en el país sino en la región”.

Sobre el dato de que por segundo año consecutivo hay más condenados que procesados, el funcionario opinó: “Este crecimiento nos permite ver que la Justicia está actuando más eficazmente”.

De la presentación en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos participaron el jefe de Gabinete del Ministerio, Martín Casares; el director nacional de Política Criminal en Materia de Justicia y Legislación Penal, Carlos González Guerra; el coordinador de Diseños Metodológicos, Hernán Olaeta, acompañado por su equipo de trabajo; e integrantes del mundo académico.

Qué dice el informe

Olaeta, encargado del equipo que se encarga de llevar a cabo este relevamiento desde hace ya más de 16 años, presentó algunos de los datos que surgieron de la información recolectada.

Con respecto a la tasa de detenidos por cantidad de habitantes, en Argentina es de 194 presos cada 100 mil habitantes. Es una de las más bajas de todo el continente: las más alta son la de Estados Unidos (655), Cuba (510) y Brasil (328). La más baja, la de Canadá (114).

Otros datos que surgen también dejan entrever el trabajo en materia de investigación del narcotráfico, ya que la cantidad de personas privadas de su libertad por delitos relacionados a la Ley de Estupefacientes creció un 203%. La cifra relativa a personas presas por el delito de violación también subió fuertemente: se registró un aumento del 217%, el mayor entre todos los delitos.

¿Cómo es el perfil de los detenidos? El 96% son hombres. El 94% son argentinos. El 69% posee estudios primarios o inferiores. El 60% tiene menos de 35 años de edad. Olaeta también puso de manifiesto que el 42% de las personas que están en prisión o en algún contexto de encierro estaban desocupadas, mientras que el 41% tenía un trabajo de tiempo parcial, dejando entrever la vulnerabilidad en materia laboral que atraviesan los presos.

Finalmente, y con asidero en la reapertura de talleres de oficios y trabajos en general y de espacios de estudio, respecto de los datos de 2006, también se registró un crecimiento en la cantidad de presos que participaron de algún programa de capacitación laboral -24%- o educativo -9% de educación no formal y 40% de educación formal-. Esto, aclaró Benitez, también está sujeto a la disponibilidad que tengan los servicios penitenciarios con respecto a estos programas.