En el marco del Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, la Subsecretaría de Acceso a la Justicia del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación entregó desde el inicio de la gestión un total de 310 dispositivos duales de vigilancia electrónica para casos de violencia de género en todo el país.

Este sistema está previsto para casos de alto riesgo que se encuentren judicializados y con medidas de protección decretada por cada Poder Judicial.

Las tobilleras y pulseras permiten conocer con precisión el geoposicionamiento de la víctima y del agresor, para controlar el cumplimiento de las restricciones de acercamiento en los casos de violencia doméstica.

Son equipos con una tecnología de avanzada que se complementan a los botones antipánico. Tienen una batería de litio que dura doce meses y avisan con anticipación cuando se está por agotar. La tobillera o pulsera está en permanente contacto con el centro de monitoreo correspondiente, cuando detecta una proximidad entre la víctima y el agresor.

En ese instante, se le advierte al primero que debe salir del lugar. En caso de no cumplirse, se convoca al móvil policial más cercano, además de avisarle a la posible víctima para que tome “medidas de autocuidado”, explicaron.

Las tobilleras constituyen una herramienta para la efectiva ejecución y sanción de las medidas cautelares, que facilita a la víctima el retomar su cotidianidad después de una situación de violencia, y que también las exime de la carga de contactar a las autoridades en caso de que haya una violación a la restricción impuesta.

María Fernanda Rodríguez, subsecretaria de Acceso a la Justicia, expresó que los dispositivos duales “son para garantizar que se cumplan con las medidas cautelares que dictan los jueces”. “Uno de los grandes problemas era que no había capacidad de controlar que la medida se cumpliese, con la posibilidad de eso le podía costar la vida a una mujer”, explicó.

Entre las ventajas que tienen las tobilleras y pulseras para casos de violencia de género, Rodríguez señaló que “mejora sustantivamente la calidad de vida de la víctima” y “más eficiente en la asignación del recurso humano policial”.

Las estadísticas

La iniciativa de alcance federal se sustenta en el Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres puesto en marcha por el Gobierno Nacional, que tuvo resultados exitosos en su prueba piloto.

En la primera fase se otorgaron dispositivos a Córdoba, Mendoza, Salta, Buenos Aires, Chubut, Neuquén, Santa Fe, La Pampa y Tierra del Fuego. Ahora se espera aumentar la dotación de dispositivos en estas jurisdicciones y sumar a nuevas provincias.

Al día de hoy, se entregaron 310 tobilleras distribuidas de la siguiente manera: 78 en Mendoza, 70 en Salta, 20 en la provincia de Buenos Aires, 30 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 10 en Chubut, 73 en Córdoba, 4 en Tierra del Fuego, 5 en La Rioja, Entre ríos, Neuquén, Santa Fe y en La Pampa.

En agosto, en las provincias de Neuquén y Entre Ríos, se cerró un acuerdo para la futura entrega de 150 pulseras electrónicas que serán utilizadas para casos de violencia de género. Son 75 para cada distrito.