En casi tres años se designaron 211 jueces, fiscales y defensores
Son cargos que estaban vacantes en la justicia federal y nacional. El número es tres veces mayor que los realizados entre 2011 y 2015. Cómo es el proceso de selección.
Desde diciembre de 2015 a la actualidad se nombraron a 211 jueces, fiscales y defensores para la justicia federal y nacional, cargos que estaban vacantes desde hace años. La cobertura de vacantes en diversos cargos del Poder Judicial contribuye a generar un sistema judicial más eficiente y justo.
Los nombramientos de fiscales, jueces y defensores fueron aumentando año a año. En 2016 fueron 41. En 2017, 76. Y en lo que va de 2018 ya asciende a 94. En total son 211 designaciones: el número es tres veces mayor que los realizados entre 2011 y 2015, que sólo llegaron a 60.
De ese total de nombramientos realizados por la actual gestión, 153 fueron jueces (24 en 2016; 50 en 2017 y 79 en 2018); 25 fueron designaciones de fiscales (10 en 2016, 9 en 2017 y 7 en 2018); y 32 de defensores (7 en 2016, 17 en 2017 y 8 en 2018).
Cómo se selecciona un juez
Para ser juez nacional o federal el proceso de concurso comienza en el Consejo de la Magistratura de la Nación. Bajo la órbita de la Comisión de Selección del Consejo se realizan los concursos. La primera parte consta de exámenes escrito y oral. Luego hay entrevistas personales y pruebas psicotécnicas. Con todo eso, se realiza un “orden de mérito”.
Luego la Comisión de Selección elabora una tentativa de terna: los candidatos entre los que luego se definirá el acceso al cargo. Una vez aprobado, el dictamen pasa al plenario del Consejo, que debe aprobarlo por mayoría especial.
Recién ahí la terna pasa al Poder Ejecutivo, que es el que elegirá al candidato que considere más apto para el cargo. Luego el pliego va al Senado. Si ese órgano legislativo aprueba el pliego, éste vuelve al Ejecutivo, que debe publicar el decreto de designación del candidato y convertirlo oficialmente en juez.
Fiscales y defensores
En el caso del Ministerio Publico Fiscal, el concurso se centra exclusivamente sobre la evaluación de exámenes de oposición y de antecedentes, que realiza un tribunal colegiado. La etapa de oposición consta de dos pruebas: u. Un examen escrito y luego, una vez obtenido los resultados, se accede al examen oral.
Existe un tribunal evaluador (integrado por cuatro fiscales y un jurista invitado) encargado de evaluar a los postulantes. Todo el trámite de los concursos es realizado por la Secretaría de Concursos del MPF. Terminada esta etapa, se envía al Poder Ejecutivo una terna que seguirá los mismos pasos que en el caso de los jueces nacionales y federales.
En el caso de los concursos de defensores, la Defensoría General de la Nación tiene una Secretaría de Concursos que asiste y colabora en los procesos de selección de candidatos. Las ternas aquí también son elevadas el Poder Ejecutivo, que deberá elegir uno de los candidatos y enviar su pliego al Senado para que preste acuerdo con la designación.