El Inspector General de Justicia, participó como expositor en una Jornada sobre el fallo “Levinas” de la Corte Suprema
“El fallo “Levinas” es sólo la punta de un iceberg”, indicó Vítolo.
Daniel Roque Vítolo, expuso en la Jornada denominada “Luces y Sombras en el Fallo Levinas”, organizada por la Asociación Argentina de Derecho Comparado (AADC) y la Universidad del Salvador. En la misma se desarrollaron paneles compuestos por especialistas en Derecho Constitucional quienes abordaron el contenido, los alcances y el impacto que ha producido en la sociedad y en la Justicia el fallo dictado por la Corte Suprema en el caso “Ferrari c/ Levinas” al establecer que en los casos en los cuales intervenga la Justicia Nacional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con competencia ordinaria, el “Tribunal Superior de la Causa”, a los efectos de lo dispuesto por el art. 14 de la ley 48 —recurso extraordinario federal— es el Superior Tribunal de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Vítolo intervino en su carácter de Profesor Titular Emérito de la Universidad de Buenos Aires y miembro de la AADC, y abordó su exposición desde la óptica referida al modo en el cual este fallo ha impactado en la vida de los litigantes y justiciables, señalando que “el fallo Levinas es sólo la punta de un iceberg que muestra el estado de desintegración que existe en Sistema de Administración de Justicia en nuestro país”.
“El contenido del fallo, la disidencia de la minoría, y la resistencia tan fuerte e impropia que tal pronunciamiento ha producido en las Cámaras Nacionales de Apelaciones en los fueros Civil, Comercial, del Trabajo y Criminal y Correccional de la Capital Federal, que han llegado dictar fallos plenarios contradiciendo la regla fijada por nuestro máximo tribunal —con conceptos y fundamentos tremendamente descalificantes—, indican el estado de deliberación y libanización en que se encuentran nuestros tribunales; algo impropio y contrario a lo que debe ser una Justicia confiable”.
Admitiendo que el contenido del fallo reviste una naturaleza fuertemente polémica, que presenta aristas discutibles, que la implementación de sus disposiciones importan un período de transición muy inestable para los litigantes, y que requiere de precisiones y ajustes en lo que hace a cuestiones vinculadas con materias, tribunales y protagonistas —como es el caso de la actuación del Ministerio Público—, a juicio de Vítolo la resistencia de las Cámaras de Apelaciones sólo producen injustificados perjuicios para litigantes y justiciables.