El INADI promueve la reforma de la ley antidiscriminatoria
El titular del organismo, Claudio Presman, sostien que es “esencial” impulsar modificaciones para que la legislación acompañe los cambios culturales. La normativa actual es de 1988.
El titular del INADI, Claudio Presman, destacó la necesidad de que se busque llegar a una nueva ley antidiscriminatoria, para que haya “sanciones concretas que colaboren a erradicar la discriminación en todas sus formas”. Para Presman, es preciso debatir una nueva normativa, ya que la Ley de Actos Discriminatorios (23.592) data de 1988: “Es esencial el debate, como también impulsar las modificaciones pertinentes para que la legislación acompañe los cambios culturales de la sociedad durante todos estos años”.
En 2016, la Cámara de Diputados de la Nación obtuvo un dictamen para el nuevo proyecto de ley antidiscriminatoria, que en ese momento y por distintos motivos no pudo ser tratada. Es decir que gran parte de la tarea ya se realizó en su momento y un buen trecho del camino está recorrido.
“El INADI, en ese momento, apoyó el dictamen. Es decir que el trabajo por una nueva ley ya comenzó –agregó Presman. Nosotros hemos abocado nuestra tarea a ofrecer aportes técnicos, como único organismo nacional especializado en la materia para que la ley que se promueva sea moderna que contemple la prevención, reparación y el goce de derechos de individuos o grupos socialmente vulnerados”.
Al ser Argentina un país pionero en el trabajo sobre la temática de discriminación, siempre se está un paso adelante, pero a su vez, se torna difícil cotejar con otra legislación más adelantada porque, sencillamente, no hay.
De interés de toda la sociedad
“La ley actual fue utilizada por varios países como modelo, sin embargo al ser pioneros en la temática también significa que a lo largo del tiempo se encuentran ampliaciones de derechos y definiciones técnicas que hace falta incorporar”, explicó Presman.
“En particular, en la ley es necesario ampliar la definición de acto discriminatorio ya que en comparación con otras leyes de la región quedó con una definición algo acotada”, sintetizó el funcionario.
“La sanción de una nueva ley antidiscriminatoria es de interés de toda la sociedad en general y en especial de los grupos o personas que históricamente le fueron vulnerados en sus derechos. Conformar espacios participativos es fundamental para la sanción de una ley de estas características, donde es necesario dar lugar y protagonismo a todas las voces”, concluyó el titular del INADI.
La idea de trabajar sobre una nueva ley antidiscriminatoria volvió a aparecer durante la presentación de la Jornada Internacional sobre Discriminación y Justicia, organizada en octubre último.