Las causas judiciales se siguen tramitando en muchos juzgados del país con expedientes de papel cosidos a mano, como hace 200 años. Por eso el expediente electrónico es una de las líneas estratégicas de trabajo del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos para la modernización de la Justicia. Se apoya a las jurisdicciones que vienen trabajando fuertemente para gestionar digitalmente todo el proceso judicial.

El expediente electrónico tiene por objetivo acelerar los tiempos judiciales y, en consecuencia, la resolución de las causas, brindando mayor efectividad y transparencia.

En la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, la Suprema Corte aprobó un nuevo reglamento para las presentaciones por medios electrónicos, que se hizo efectiva a mitad de año. Los juzgados ya no pasarán a formato papel las presentaciones electrónicas, salvo excepciones.

Algo similar ocurre en la ciudad de Buenos Aires: los fueros Contencioso Administrativo y Tributario pusieron en marcha el Expediente Judicial Electrónico. Contempla el uso de la firma digital, la estandarización de la información y la notificación electrónica. Otros distritos del país también avanzaron en ese sentido: Mendoza, San Luis, Entre Ríos y Salta, entre otras provincias.

Las ventajas: celeridad del proceso, ya que apenas es iniciado y firmado electrónicamente se constituye en la mesa de entrada digital. También se reduce el gasto en papel. Se optimizan los espacios de trabajo y se genera una estructura de archivos con mejoras en estándares de transparencia y seguridad.