La Cámara de Diputados convirtió en ley el proyecto de Arbitraje Comercial Internacional. Es una norma que establece un marco legal para la cooperación y resolución de conflictos comerciales internacionales. El año pasado el Senado había dado la media sanción. “Es un hito fundamental en el fortalecimiento de la institucionalidad, la previsibilidad y solución de controversias rápidamente y con un bajo costo. Esto contribuye decididamente al progreso de la sociedad y al desarrollo económico y social”, explicó el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano.

La ley incorpora en la Argentina la Ley Modelo sobre Arbitraje Comercial de la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional, considerado una herramienta fundamental para atraer inversiones extranjeras.

Hernán Calvo, asesor a cargo del Programa Nacional de Coordinación General de Derecho Privado, explicó que “ubica a la Argentina dentro de los países respetuosos de la seguridad jurídica”. Señaló además que “va a beneficiar al país, ya que a los inversores extranjeros les permite contar con una herramienta fundamental para dirimir las controversias”.

Calvo aclaró, además, que “éramos unos de los pocos países que no habíamos adoptado este modelo”. Se refiere a que leyes de arbitraje de este estilo ya rigen en Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay, Perú, Venezuela, Colombia, Ecuador, México, Honduras, Nicaragua, Ecuador, Costa Rica, Panamá, e incluso España.

Se recurre al arbitraje internacional cuando las empresas han agotado sus posibilidades de negociación respecto a una disputa comercial. Este modelo de resolución de conflictos funciona de manera sencilla, confiable, flexible, rápida e implica menores costos que los tribunales de Justicia.

El proyecto surgió por iniciativa de Agustina Díaz Cordero, quien estuvo a cargo inicialmente del Programa de Derecho Privado y que hoy forma parte de la Dirección de Modernización Judicial a cargo de Javier Wajntraub. El Programa Justicia 2020 del Ministerio de Justicia impulsó reuniones con todos los sectores involucrados, para reflexionar sobre la mejor incorporación de esta ley en el derecho argentino. A partir de estos aportes se consensuó la redacción del anteproyecto.

Beneficios del arbitraje internacional

-El arbitraje cumple un rol importante como un mecanismo flexible, rápido y confiable para la resolución de las controversias comerciales.

-En la Argentina la legislación sobre arbitraje está pensada para casos domésticos. El arbitraje internacional requiere reglas particulares y adaptadas a las que rigen en otras partes del mundo.

-Se brinda a los inversores extranjeros una alternativa diferente de la vía judicial.

-Fortalece la agilidad de los sistemas judiciales, porque descomprime la labor de los órganos judiciales.

-Ofrece privacidad, simplicidad, velocidad y menores costos que la vía judicial.

-Se facilita un clima favorable a la concertación de transacciones internacionales y facilita el proceso de globalización económica. Brinda certeza y garantía de eficiencia, imparcialidad, confidencialidad.

-La esencia del arbitraje radica en que las partes pueden nombrar –a instancia de parte- el/los árbitros que diriman la cuestión litigiosa que les compete. Y también pueden elegir el lugar de la sede arbitral.