INDEC y SEDRONAR presentaron nueva encuesta nacional sobre consumo de sustancias y prácticas de cuidado
El estudio arroja información sobre el consumo de sustancias psicoactivas, tanto legales como ilegales, en la población urbana de 16 a 75 años. Además, por primera vez, indaga sobre las motivaciones y contextos del consumo.
Junto a las y los referentes de temas de atención y prevención de los consumos problemáticos de las 24 jurisdicciones, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y el Observatorio Argentino de Drogas de la SEDRONAR presentaron esta tarde en Casa Rosada la Encuesta Nacional sobre Consumos y Practicas de Cuidado 2022 (ENCOPRAC), que explora y analiza el consumo de sustancias psicoactivas en la población urbana de 16 a 75 años, las diferentes modalidades de uso y el perfil de los consumidores. Además, por primera vez, indaga sobre las motivaciones y contextos del consumo como así también sus recaudos y prácticas de cuidado.
“Desde el inicio de nuestra gestión en SEDRONAR planteamos la necesidad de ampliar la perspectiva sobre la cual se produce información sobre esta temática. Lamentablemente, debimos posponer la realización de la encuesta por el COVID, que estaba planteada para mediados de 2020 y recién en 2022 pudimos llevarla a cabo, junto al INDEC”, aseguró Torres, quien destacó el trabajo conjunto con ese organismo que no se hacía desde 2004, hace casi 20 años atrás.
La Encuesta Nacional sobre Consumos y Practicas de Cuidado 2022 estima la problemática de los consumos de sustancias, tanto legales como ilegales; determina sus prevalencias de vida, año y mes; da a conocer los factores asociados, de protección y riesgo; e indaga sobre las prácticas de cuidado de sí, de otros y otras y la demanda a servicios de atención y tratamiento por los consumos de sustancias existentes.
De esta manera, en el estudio se incluyeron indicadores sobre los motivos de consumo, las prácticas de cuidado o recaudos que toman las personas para cuidarse de los posibles efectos no deseados del consumo y factores que hacen a la situación de los consumos, los lugares donde las personas consumen y las compañías con las que comparten la práctica. Así, esta encuesta brinda una perspectiva integral, abordando las diferentes dimensiones y modalidades de los consumos de sustancias, para orientar el diseño, la implementación y el monitoreo de políticas públicas desde una perspectiva de derechos humanos.
El paradigma de derechos humanos convoca a complementar las tradicionales mediciones de prevalencia, incidencia y patrones de consumo con otras dimensiones de estudio, jerarquizando la consideración por las condiciones sociales de vida y su relación con los procesos de salud-enfermedad-atención-cuidado, los escenarios variables de las prácticas de consumo de drogas, y la concepción de la salud pública como un amplio campo de saberes y prácticas sobre el bienestar colectivo, entre otros aspectos.
Al respecto, la titular de la SEDRONAR señaló que esta encuesta “es una foto no solo de qué, sino de cómo consumimos. Es la primera vez que al decir cómo consumimos, qué percepción tenemos del consumo y qué sabemos de cómo cuidarnos, no solo nos da pautas de intervención, sino que es un valor agregado a los históricos índices de prevalencia”.
Los resultados obtenidos a partir de esta encuesta no pueden ser comparados con los arrojados por estudios anteriores. La inclusión de la franja etaria de 66 a 75 años a nivel general del cuestionario, el sondeo sobre medicamentos con prescripción médica (hasta hoy nunca antes indagados) y la diferenciación entre uso terapéutico y no terapéutico en el consumo de marihuana representan elementos insoslayables a la hora de pensar los resultados del presente estudio, en el marco de las tendencias históricas del país.
Finalmente, este es el primero de una serie de trabajos presentados por el Observatorio Argentino de Drogas que prevé otras publicaciones durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, entre las que se destacan la magnitud de los consumos a nivel regional, además de trabajos específicos sobre alcohol, marihuana y psicofármacos y sus prácticas de cuidado, entre otros.