La instalación de micromedidores en Concordia, Entre Ríos, alcanzó un avance aproximado del 60%. Esta obra, financiada con más de $451 millones por el Banco Interamericano de Desarrollo a través del programa PAyS II, tiene como objetivo cuidar el agua y mejorar la metodología de cálculo y recaudación para que sea equitativa y solidaria.

En ese sentido, Enrique Cresto, intendente del municipio entrerriano y otrora administrador del ENOHSA, destacó ante la prensa local: “La colocación de medidores tiene una doble importancia porque, por un lado, beneficia a los consumidores que utilizan el agua de manera responsable y pagarán lo que es justo por su consumo; y por otro, representa un beneficio ecológico ya que nos permitirá reconocer fugas, pérdidas o derroches en un bien escaso y vital”.

La contratista ENERCOM está a cargo de la obra, que también genera 25 puestos de trabajo. Se instalarán 5.400 micromedidores en la zona I del área de servicio en Concordia, donde los niveles de cobrabilidad son más altos, para lograr una medición completa del área. Además, se colocarán cuatro macromedidores estratégicos para medir toda la producción y distribución de agua potable en la red. Se proporcionarán equipos para tomar lecturas y facturar, mejorando los procesos de carga de datos y la atención de reclamos relacionados con la micromedición.

Asimismo, se entregarán ocho equipos móviles que permitirán registrar lecturas con fecha, hora y posición geográfica, así como realizar observaciones y adjuntar fotos en caso de anomalías en las mediciones. También facilitarán la carga de múltiples rutas.

Es importante destacar que esta iniciativa no busca recaudar ni sancionar, sino erradicar los hábitos de derroche y mal uso del agua, contribuyendo así a la preservación de este recurso fundamental para la vida.