Desde el retorno de la democracia, sobrevivientes del centro clandestino de detención, junto a familiares de los detenidos-desaparecidos y las detenidas-desaparecidas, organismos de derechos humanos y organizaciones barriales, reclamaron la excavación del sitio donde funcionó el “Club Atlético”.

En abril de 2002, se iniciaron las obras arqueológicas que permitieron encontrar los restos del sótano y una gran cantidad de objetos, que fueron prueba material del testimonio de las víctimas.

Al año siguiente, se creó el Programa de Recuperación de la Memoria y se conformó la Comisión de Trabajo y Consenso, integrada por sobrevivientes, familiares, organismos de derechos humanos y organizaciones barriales, junto con áreas específicas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con responsabilidad en el proyecto.

La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires lo declaró Sitio Histórico, mediante la Ley N° 1794 aprobada en 2005. Su administración estuvo a cargo del Instituto Espacio para la Memoria (IEM) hasta 2014, cuando pasó a depender de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.

En octubre de 2014, el Decreto N° 1762 lo declaró lugar histórico nacional.