Finalizó el examen único, digital y ubicuo para ingresar a residencias en todo el país
Por la pandemia, la prueba volvió a ser remota y simultánea en todo el país.
Un total de 8.834 profesionales aspirantes a acceder a 6.300 residencias nacionales, provinciales y universitarias en hospitales públicos y privados e instituciones sanitarias de todo el país, rindieron esta mañana el examen único digital y ubicuo que les permitirá acceder a la formación de posgrado.
Se trata de graduadas/os de las carreras de medicina, enfermería, bioquímica, kinesiología, psicología y otras profesiones incluidas en los equipos de salud que, al igual que el año pasado y por las limitaciones derivadas de la pandemia, completaron las pruebas de modo remoto a través de una plataforma diseñada en conjunto por el Ministerio de Salud de la Nación y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y el apoyo de ARSAT.
La plataforma cuenta con los estándares de seguridad informática y de proceso, y facilita el acceso a la instancia de evaluación de las y los profesionales que aspiran a las residencias como ámbito de formación de posgrado.
Los resultados del examen –así como las respuestas correctas– serán publicados en la web del ministerio de Salud el día 16 de septiembre.
El examen se extendió entre las 8 y las 12 horas, una hora y media más que lo establecido inicialmente, debido a la necesidad de reasignación de mayor cantidad de recursos informáticos para mejorar la fluidez de las conexiones durante su desarrollo. Además contó con una mesa de ayuda que funcionó correctamente atendiendo las necesidades de información de las y los participantes.
Las y los aspirantes a acceder a los cupos dispuestos debieron responder preguntas de opción múltiple y con razonamiento crítico. La prueba contó con medidas de seguridad para favorecer la transparencia y permitir la detección de eventuales situaciones de fraude, a partir de diferentes tecnologías propias del sistema según el momento del examen.
Para acceder al mismo, cada profesional contó con un usuario y una contraseña personalizadas. Durante la prueba, se aplicaron protocolos que capturan imagen y sonido en tiempo real, capaces detectar voces o audios intrusivos, la presencia de otras personas o elementos adicionales no permitidos para rendir, como por ejemplo libros, uso de auriculares u otros dispositivos de consulta.