Por Lic. Cecilia Vergara. Fotos por PC José Solis.

Durante la mañana del 24 de abril, en las instalaciones del Museo Nacional de Aeronáutica (MNA), ubicado dentro de la Base Aérea Militar Morón, se realizó la puesta en funciones del nuevo director del organismo.

Fue presidida por el secretario general del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier Fabián Otero, acompañado por el titular de la BAM Morón, comodoro César Grando; el asesor del intendente del municipio de Morón, Leonardo Dartayeta; ex titulares del MNA, brigadieres en actividad y en situación de retiro, veteranos de Guerra de Malvinas, integrantes de Escuadrón Fénix, amigos del Museo y personal militar y civil de la Institución.

Para iniciar el acto protocolar, el vicecomodoro Rubén Alzamora, jefe saliente, se dirigió a los presentes diciendo: “Hoy cierro uno de los momentos más importantes de mi vida y puedo compartirlo con ustedes en este hermoso lugar. Siempre me pregunté cuántos lugares así existen para trabajar con música, parque y lo más importante: aeronaves de todos los tiempos, con esa magia que transmiten (…) Cuánta pasión que despiertan a todos aquellos que, de un modo u otro, escuchamos un motor y levantamos la vista por un instante para contemplar en el cielo el fenómeno del vuelo”.

Y agregó: “Qué bueno trabajar en un lugar donde otros interrumpen su descanso para contemplar nuestro patrimonio, testigo de nuestro pasado glorioso presentado como un ejemplo para las generaciones futuras. Cuánto orgullo tiene el personal de este Museo, en el cuidado de sus bienes para mostrarlos de la mejor manera a esos visitantes. Cuánto compromiso, imposible de asumir, sin el esfuerzo diario en apoyo y sostén logístico de la superioridad a través de la Secretaría General”.

El oficial también agradeció a la Asociación de Plastimodelistas del Oeste, la Asociación Amigos del Museo Nacional de Aeronáutica, el Escuadrón Fénix, el Grupo Técnico de Restauraciones Aeronáuticas, al comodoro Néstor Padilla -su mentor, como él lo definió- y al señor Carlos Moise por el acompañamiento brindado en cada desafío que el Museo emprendió. “Sólo quiero humildemente reconocer que su acompañamiento facilitó mi gestión y los comprometo a seguir asistiendo a la nueva dirección del Museo”, expresó.

Haciendo referencia a los integrantes de la Institución manifestó que “hicieron de una pasión personal un trabajo que me resultó infinitamente más fácil y placentero en todo los destinos. He aprendido mucho de ustedes y agradezco su paciencia y camaradería”.

“No puedo dejar de lado a mis padres y su orgullo, a través de la pasión por la aviación de mi papá, la cual heredé; a Estela, mi esposa, mi copiloto de este vuelo que se llama familia, en tantas ausencias; a mis hijos, Mariana, Federico y Hernán, como tripulantes que siempre me apoyaron y contuvieron, conteniendo su llanto en alguna comisión prolongada o en mis momentos difíciles de salud, estando siempre a mi lado y acompañando a su madre”, finalizó emocionado.

Luego, se leyó la orden interna que designa al vicecomodoro Walter Olmedo como el nuevo titular del organismo. El brigadier Otero agradeció, en nombre de la Institución, la gestión del vicecomodoro Alzamora y pronunció la fórmula de rigor, poniendo en funciones al vicecomodoro Olmedo, quien luego de saludar al personal a su cargo, entregó la banderola distintiva al director saliente.

Para finalizar, el brigadier Otero entregó un ramo de flores a la señora del vicecomodoro Alzamora, a modo de reconocimiento por el acompañamiento brindado a su marido durante su carrera militar.

En el desayuno de camaradería, el ex titular del Museo, comodoro (R) Néstor Padilla entregó a los vicecomodoros Alzamora y Olmedo un documento en el que se detalla todos los aviones puestos en valor desde su gestión hasta la actualidad, como modo de resaltar el trabajo realizado y para que el flamante director continúe el ejemplo de sus antecesores.

Asimismo, el secretario general aprovechó la ocasión para manifestar que durante este año toda la Fuerza Aérea estará involucrada en el programa de puesta en valor del Museo y se espera una reinauguración para noviembre.

Haciendo de una pasión, un trabajo
Durante su gestión, el vicecomodoro tuvo que superar grandes desafíos. Entre ellos el corte de suministro eléctrico, el cierre al público y las consecuencias de un tornado que inundó las instalaciones y movió aviones de lugar, entre otras dificultades.

Pese a esto, tanto el vicecomodoro como su personal no sesgaron en esfuerzos y solicitaron colaboración para restaurar el material dañado y poner en pie al Museo. “De a poco fueron surgiendo las cosas y yo recogí la cosecha de mis antecesores”, aseguró.

En este sentido, el Museo comenzó a tener más importancia a nivel institucional y nacional: se inauguraron salas temáticas y se incorporaron nuevas aeronaves; participó en jornadas de puertas abiertas y en varias ediciones de la “Noche de los Museos”; se realizaron acciones sociales junto a asociaciones civiles locales; se llevó de visita a delegaciones extranjeras; se aunaron esfuerzos con grupos de restauradores; se realizaron eventos de toda índole; se recibieron la visita de centenares de colegios.

Actualmente, el Museo Nacional de Aeronáutica está conformado por un grupo interdisciplinario y multifacético de 40 personas y que acompañarán al vicecomodoro Olmedo en una nueva gestión buscando siempre dejar el Museo en lo más alto.