“Tarda en llegar y al final hay recompensa”, se leía en un cartel pegado en la pared del salón donde se llevó a cabo el inicio del ciclo lectivo para 229 internos que empezarán y continuarán su carrera universitaria en el Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo (IUNMa), en el Complejo Penitenciario Federal II, en el partido bonaerense de Marcos Paz.

El acto de apertura con la presencia de Silvia Iacopetti, directora nacional del Sistema Argentina de Información Jurídica (SAIJ), Martín Böhmer, director nacional de Relaciones con la Comunidad Académica y la Sociedad Civil, y Sabrina Santopinto, directora de Comunicación Audiovisual en Contenidos de Justicia.

También estuvo Javier Buján, rector organizador del IUNMA, Gabriela Amenta, secretaria académica del IUNMA, y Martín Fernández Nandín, coordinador de la Dirección Nacional de Readaptación Social de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios y Relaciones con el Poder Judicial y la Comunidad Académica.

En el inicio del acto, previo a la entonación de las estrofas del himno nacional por la Banda musical del Servicio Penitenciario Federal, Böhmer destacó “el esfuerzo de todos por estudiar” y “la demanda de los estudiantes por una mejor calidad académica”. “Esperamos responder con más y mejor infraestructura para la demanda de todos ustedes y responder de la mejor manera”, agregó.

Estudiar como forma de reinserción

La carrera de Derecho, el profesorado y licenciatura en Historia, y las licenciaturas de Trabajo Social y Comunicación son las opciones que los internos tienen para estudiar. Este año hubo un incremento de la matrícula del 9 por ciento y se incorporaron materias del segundo ciclo de cada una de las cinco carreras.

Los estudiantes cuentan con 2.000 libros de textos jurídicos donados por el Sistema Argentina de Información Jurídica (SAIJ), para que tengan acceso a bibliografía de cada carrera. El Ministerio de Justicia, por otra parte, donó diez nuevas computadoras: en total, tendrán 24 nuevas PC para estudiar en las aulas de la unidad carcelaria 4 de Marcos Paz.

El IUNMa fue creado por la Ley 26.995. También se creó la Comisión de Coordinación y Enlace, en la que se designó como representantes a Buján y a Böhmer, con el objeto de abordar los aspectos logísticos y velar por su efectivo cumplimiento.

Ampliar derechos

Iniciado el ciclo lectivo, los internos recibieron sus libretas universitarias que acreditan su condición de alumno regular de una institución nacional. En general, la carrera más elegida es Derecho, con un total de 129 estudiantes de un total de 229.

Buján explicó que “la educación en contexto de encierro implica más que la resocialización y también ayuda a ampliar sus derechos como ciudadanos”. “Es una obligación del Estado cumplir con la ley y la Constitución para que las poblaciones vulnerables puedan estudiar”, agregó.

Por último, Buján destacó que más del 70 por ciento de los alumnos que cursan rindieron el examen final, “lo que habla del compromiso como forma de superación”. El 80 por ciento de la matrícula corresponde a alumnos-internos que debutan en el ambiente universitario.