Cascos Blancos - Desminado humanitario en Angola
Angola (1997 – 1998)
Función
Misión humanitaria para realizar el desminado terrestre en Angola.
Sede
Luanda, Angola.
Participación de la Armada Argentina
Los Cascos Blancos es una organización creada en julio de 1994 a instancias del Poder Ejecutivo nacional argentino y presentada a la comunidad internacional a través de la ONU. Su objetivo es colaborar en diversas tareas que contribuyan al mantenimiento de la paz.
La utilización de minas terrestres en zonas conflictivas de diferentes regiones del mundo ha ocasionado serios problemas que afectan la vida social y económica de los países involucrados, destacándose por su gravedad las situaciones imperantes en Angola, Camboya y Afganistán.
La guerra civil angoleña, iniciada en 1975 y enmarcada dentro del enfrentamiento Este-Oeste de la guerra fría, permitió la introducción de millones de minas terrestres en su territorio. Al firmarse en 1991 los acuerdos de paz, el desminado constituyó una de las cuestiones a resolver.
El cese del fuego de los años 1991 -1992 permitió dar una limitada respuesta al problema de las minas, que se profundizó con la continuación de la guerra a fines de 1992.
Los acuerdos de Lusaka trajeron una nueva paz en 1995, pero en el país se hallaban dispersas millones de minas terrestres pertenecientes a una gran variedad de modelos y originarias de numerosos países. De esta manera la vida de la población civil y el funcionamiento de la economía angoleña se veían gravemente afectados
La modalidad de acción de los Cascos Blancos los llevó a aplicar iniciativas de apoyo comunitario en diferentes áreas. Entre ellas se destaca la operación de desminado terrestre en Angola.
La magnitud y seriedad del problema determinaron la necesidad de requerir a la Armada el envío de personal especializado. Durante 1997 y 1998, el personal desempeñó funciones de jefes, asesores y supervisores de instrucción en desminado e identificación, delimitación y limpieza de minas terrestres.
Los trabajos realizados en diversos lugares afectados por este problema, como Huambo, Uije, Malanje, Kuito, Cunene, Cuango, etc., solo marcan el esfuerzo por reducir la proporción de minas de dos a una por ciudadano angoleño.