Uniformes del siglo XX
El siglo XX en lo relativo a uniformes navales es sumamente rico y por lo tanto complejo en sus variedades, diferencias, usos y costumbres.
El siglo se inicia con un nuevo "Reglamento de Uniformes de la Marina de Guerra Argentina" puesto en vigencia el 20 de noviembre de 1901 y que estuvo en uso hasta el año 1923. Estaba dividido según las categorías del personal naval en: “Jefes y Oficiales” y “Personal Subalterno”. Cada sección detallaba los uniformes a usar según las ocasiones del servicio, los detalles de las prendas a vestir, con cortes y medidas, y se complementaba con una serie de láminas (un álbum) bellamente impresas. Este reglamento, con modificaciones, supresiones y agregados fue el que sirvió de base para los siguientes de 1923 y 1944-47 y rigió en su estilo, casi hasta mitad del siglo XX.
Aparece por primera vez el uso del aro o coca en el galón superior de las mangas y hombreras, que es de inspiración británica y ya ha cumplido 100 años de uso, imponiéndose por derecho propio como distintivo de nuestros Oficiales. Primero lo fue sólo de los del Cuerpo General, y pasada la mitad del siglo de todos sin distinción.
Los usos del uniforme estaban divididos en gala (casaca y bicornio, espada y charreteras), social (frac); media gala (levita, con charreteras bicornio); servicio (levita de diario, gorra); diario (saco de paño, gorra; en verano de brin blanco, gorra blanca).
El reglamento de 1901 también señala en un par de cuadros los tipos de uniformes a utilizarse por el personal subalterno y las ocasiones de cada uno de ellos. Estaban divididos en: paseo (saco de paño, gorra y sable), diario (blusa de paño, gorra.), diario de verano (con blusa de brin blanco) y faena (blusa, pantalón blanco, gorra con funda.), todos para oficiales de mar, maestranza, mecánicos.
Las clases y marinería tenían una variedad mayor de posibilidades en uniformes y en ocasiones de uso, quedando señaladas 5 clases de uniformes de paseo con sus distintas ocasiones, todos de camiseta de paño o de brin blanco según la estación, cuello azul, pantalón de paño, corbata, rabiza, gorra de paño, cinturón. Las Insignias y distintivos de especialidad eran de trencilla de estambre de color rojo, para la ropa de paño, y azules, para la blanca de brin, y se llevaban en ambas mangas.
Entre 1901 y 1923 se hicieron modificaciones como el uso en climas fríos, de Bahía Blanca abajo, del gabán a la tropa que desembarcaba para paseo. Lo mismo sucedió con el capote de los oficiales que se autorizó su uso fuera de abordo y aún para ceremonias de gala. En ocasión de las fiestas del Centenario, el presidente Figueroa Alcorta, por decreto del 20 de mayo de 1910, declaró reglamentaria la faja de seda azul con borlas de oro en los uniformes de gala de los almirantes.
En 1917 se suprimió el uso de la gorra negra en invierno y desde ese año se usaría sólo la gorra blanca todo el año, excepto el personal de faros y subprefecturas. Poco después se suprimió el galoneado de grado de la banda de la gorra, quedando banda de seda negra.
En 1923, se editó un nuevo reglamento de uniformes para la Armada. La mayor novedad del nuevo reglamento fue la aparición del “saco del uniforme de diario”, más conocido como saco naval, de paño azul marino, cruzado; con galones distintivos de jerarquía en la bocamangas; cerrado con dos hileras de 3 botones (que alguna vez serían 4 y luego volverían a 3) que debían ir siempre prendidos; bolsillos exteriores. Se instituyó además un traje de faena para usar en los torpederos y en los demás buques durante los trabajos en que fuera necesario de género de algodón color caqui oscuro, de corte semejante al que se usaba de verano.
Los Suboficiales conservaron sus uniformes y clases como en el anterior reglamento, pero aparecen las insignias de radiotelegrafistas, aviadores, señaleros, furrieles y enfermeros. Los uniformes de clases y marinería no variaron sensiblemente de las anteriores, pero apareció el distintivo de aprendiz de la Escuela de Mecánica que era una hélice bordada de hilo dorado, lo de otras escuelas en lana roja o azul, según el caso. En un apartado especial se describen por vez primera las cintas de las gorras y sus letreros, las letras ARA antecederán a cualquier inscripción de los buques; las bases navales por las letras BN; los Arsenales, con la palabra y las Escuelas con el nombre completo. Otros letreros eran los de “Isla Martín García”, “Servicio Radiotelegráfico”, “Servicio de Faros”, “Prefectura General Marítima”.
Hacia 1928, según recordaba el Capitán de Navío Romano Yalour, el corte de la levita fue modificado, abriendo su parte superior, confeccionándose ahora con cuello y solapas, para usar con camisa blanca de cuello duro y corbata negra.
El antiguo uniforme de diario de saco negro cerrado con vivo en los bordes y el cuello, estilo norteamericano fue reemplazado desde 1923 por el “saco naval” a la inglesa.
Para las guardias de las máquinas, calderas, generadores eléctricos, o en la torres de artillería, estaba permitido el uso de un traje de faena constituido por la chaqueta de brin de algodón de color caqui, dependiendo de la partida que vendía la sastrería naval, a veces podía ser verde botella. En los buques grandes la faena no era tolerada, en otras circunstancias que en la ejecución de un “trabajo sucio”, por lo que no era lícito transitar por cubierta principal con este atuendo, Además estaba totalmente prohibido permanecer en las cámaras, y menos aún almorzar cenar o tomar la merienda con dicha vestimenta.
En 1940 se dio una modificación producto de la situación internacional, introduciendo la idea del uniforme de “tiempo de guerra”, que debía entrar en vigor al momento de decretarse la movilización y su aplicación era general en toda la Marina con excepción de los agregados navales. Todos los uniformes eran reemplazados por el de diario de invierno con saco naval y funda blanca en la gorra, camisa de cuello blando. Quedaban fuera de uso además todos los uniformes de desfile, que se reemplazaban por el de diario con saco naval. Lo mismo ocurría con los de Artillería de Costas que eran todos reemplazados por el de diario y el de faena.
Poco después se modificó el de Artillería de Costas, que quedaba como uniforme de tiempo de guerra, para navegación, desembarco, campaña, instrucción y cuarteles y era de: saco de faena de color verde oliva con vivos rojos, pantalón de lo mismo o breeches, birrete, camisa verde oliva, botín, bota, medias y hombreras de faena. Otro tanto ocurría con los uniformes de los suboficiales de Artillería de Costas. Para desembarco en campaña, se llevaba con sable bayoneta, pistola y correaje, binóculos prismáticos, silbato y todo otro implemento que, por la índole de la operación, ordene el jefe de las fuerzas.
En 1943, por tiempo de guerra, se abolió el uso de la casaca de gala y fue reemplazado por la levita, con charreteras y bicornio. Según Romano Yalour, en la Escuela Naval Militar se usó por última vez en la ceremonia de Jura de la Bandera del año 1944.
Terminada la guerra apareció un nuevo uniforme de diario, el de color gris, que eras provisto por SADOS (Sastrería y Almacenes Dirección Obra Social) y entró en vigor el 1° de julio de 1945 para la Escuadra de Mar, el 1° de septiembre para las bases navales y escuelas y desde el 1º de diciembre para el resto de la Armada.
Era un uniforme de saco, pantalón, gorra funda gris, hombreras flexibles, camisa blanda de cuello semiduro, corbata negra, zapato negro, medias negras o blancas según la estación. Era también para campaña y desembarco, vestido con polainas de cuero negro, sable bayoneta, correajes, pistola, prismáticos, silbato y todo otro implemento que sea necesario en los ejercicios de desembarco o maniobras. Para Faenas: se sustituyó el viejo uniforme por un “overall”, enterizo, de brin color gris, cierre relámpago al frente, bocamangas y tobillos cerrados a presilla con botón; con hombreras flexibles y gorra naval con funda gris. Este se usaría en trabajos sucios, o en torres de artillería, doble-fondos, máquinas, motores y calderas; tanto a bordo como en tierra.
En esos años se crea el Cuerpo de Oficinistas navales, llevaría las mismas prendas que los otros cuerpos de suboficiales y en las mismas circunstancias, incluso el de campaña como los de Infantería de Marina.
Los Cabos y marineros de todos los cuerpos de marinería usaban un uniforme de paseo de blusa de paño azul con cuello marinero, mangas anchas y ceñidas a la muñeca, pantalón de paseo, gorra de paseo, borceguíes, elástico de invierno, corbata, rabiza, jinetas y distintivos, medallas. Este era usado para galas y medias galas, estando en puerto, visitas de público y en licencias. Para desfile se le ponían polainas y guantes blancos, correaje y armamento y en desembarco se usaba el de diario con polainas caqui, manta terciada, con útiles de rancho y caramañola, correaje y armamento.
Los cabos de submarinos llevarían los mismos uniformes de los suboficiales y los de aviación los mismos uniformes de vuelo de los suboficiales de ese cuerpo. Los Cabos y soldados de Infantería de Marina los mismos uniformes de paseo de los suboficiales; cinturones y tahalíes de lona blanca, sable bayoneta, guantes marrones. El de campaña el verde oliva; el de faena de overall gris. En desfiles el uniforme de paseo con polainas, guantes y correaje blanco completo.
Desde finales de la Segunda Guerra Mundial comenzó cierta influencia norteamericana en los uniformes, en especial por la practicidad de algunas prendas de uso a bordo, como las camperas, los overoles, los uniformes más sufridos, modalidades que se afianzaron con la compra de unidades post Segunda Guerra, muchas de las cuales venían con elementos de vestuario y equipos incorporados que se adaptaron para la marinería. Algunos han llegado a señalar que se usó el uniforme de faena o fajina americano de camisa azul celeste y pantalones tipo “jean”, pero no podemos afirmarlo categóricamente porque no hay registro escrito de ello, sólo fotografías de maniobras.
Durante la década de los 50 entró en uso una prenda cómoda y práctica, la campera de paño azul marino, con paletas flexibles del mismo paño y grado de trencilla amarilla. Y para la misma época empezó el uso del birrete gris a bordo.
Hacia 1970/71, se hicieron propuestas para suprimir la levita y las charreteras, pero no fueron suprimidas sino suspendidas, primero por dos años, y luego quedaron como de uso facultativo. En esos años también los barbijos de todas las gorras de oficial pasaron a ser de cordón dorado, incluso los de los cadetes. Hasta entonces el barbijo dorado había sido prerrogativa de Jefes y Almirantes, siendo los de los subalternos de seda negra con filo dorado. Por otro lado y en el mismo año, la serreta de la visera fue ampliada en su uso hasta Capitán de Corbeta, y con la visera forrada de paño.
En 1986 se modificó el reglamento de uniformes a fin de adecuarlos a la época a la vez que disminuir los costos para la Armada y para el personal que debía usarlos. Habiéndose producido el agotamiento de los acopios de uniformes, de diario gris principalmente, se extendió el uso de un mismo saco naval para todo el personal militar superior, subalterno para uso diario y general, excepto marineros, conscriptos y aspirantes navales. Se derogó como obligatorio el uniforme de Levita y quedó su utilización para desfiles y como uniforme optativo. Se puso en vigor en la Armada el uniforme de embarco, de pantalón de paño azul marino, camisa blanca, pulóver de lana azul marino con refuerzos de tela en hombros y codos, con presilla en los hombros; zapatos negros o botas negras de caña corta; boina de color negro con distintivo de la Armada; campera color azul marino, con cierre a cremallera. Es para uso diario en unidades navales y dentro de aquellas unidades, organismos y dependencias en que específicamente se autorice.
Con el uniforme diario, en cualquiera de sus variantes, el personal militar superior y subalterno, desde Cabo Principal, utilizará el gorro azul negro con visera, manteniéndose como optativo el uso de la gorra de gala. El gorro azul negro con visera, lleva escudo ARA e inscripción ARMADA ARGENTINA, en letras bordadas de hilo amarillo. Para oficiales y jefes, la parte superior de la visera llevará bordada en hilo amarillo la guía o serreta que corresponda a su jerarquía. Las unidades navales están autorizadas a llevarlo con las leyendas alusivas de la unidad.