Quíntuple (o pentavalente)
¿Contra qué enfermedades protege?
Difteria
Es una enfermedad infecciosa grave causada por una toxina producida por la bacteria Corynebacterium diphtheriae. La infección puede causar difteria respiratoria o cutánea y en casos raros puede conducir a la difteria sistémica.
La forma respiratoria se caracteriza por la formación de pseudomembranas en la garganta, mucosa nasal u otras mucosas y un cuadro febril, generalmente no muy intenso, de evolución relativamente lenta, pero con estado general comprometido y progresión de los síntomas en 2 o 3 días.
La forma cutánea se trata de una infección leve de la piel, pero puede ser fuente de transmisión.
La infección inaparente y la colonización son mucho más frecuentes que las formas clínicas de la enfermedad.
Se transmite de persona a persona a través de las secreciones respiratorias que las personas infectadas expulsan al toser, hablar o estornudar.
La complicación más habitual es la miocarditis, la cual también es la principal causa de muerte. También pueden observarse complicaciones neurológicas.
Tétanos
Es una enfermedad grave causada por las esporas de la bacteria Clostridium tetani que se encuentran presentes en el polvo, tierra o heces animales o humanas. Se introduce en el cuerpo a través de una herida aguda causada por traumatismos, mordeduras, intervenciones quirúrgicas o inyecciones o a través de lesiones e infecciones cutáneas crónicas (abscesos, úlceras de decúbito, gangrenas, abortos, quemaduras, infecciones del oído medio).
Es la única enfermedad inmunoprevenible que es infecciosa pero no contagiosa, es decir, no se contagia de persona a persona.
Tiene un periodo de incubación de 2 a 21 días, con un promedio de 10 días, luego del cual se manifiesta con espasmos o contracturas musculares masivas, lo que lleva al deterioro de la función respiratoria y cerebral por compromiso muscular.
En nuestro país existen casos de tétanos en personas adultas no vacunadas.
Tos convulsa o coqueluche
Es una infección respiratoria muy contagiosa causada por toxinas producidas por la bacteria Bordetella pertussis que evoluciona en tres fases (catarral, paroxística y de convalecencia) y puede manifestarse en formas leves o severas, estas últimas especialmente en menores de 6 meses.
Se transmite de persona a persona a través de las secreciones respiratorias que las personas infectadas expulsan al toser, hablar o estornudar.
El período de incubación oscila entre 1 a 3 semanas, más frecuentemente de 7 a 10 días. Los primeros síntomas son similares a los de un resfrío común, a los que se les suma una tos seca que llega a ser tan intensa que habitualmente altera la respiración, causa el ahogo del menor y le genera problemas al alimentarse y dormir.
La tos convulsa es más grave en menores de 6 meses. En personas adolescentes y adultas, la enfermedad puede ser más leve o no presentar síntomas pero pueden transmitir la infección.
Haemophilus influenzae tipo b (Hib)
Es una bacteria que se propaga fácilmente por secreciones respiratorias al momento de estornudar o toser. Puede causar enfermedad invasiva (principalmente neumonía, meningitis y bacteriemia) y enfermedad no invasiva (otitis, sinusitis, artritis, entre otras).
Hepatitis B
Es la inflamación del hígado causada por el virus de la hepatitis B, que se transmite por el contacto con sangre contaminada, por contacto sexual, transmisión vertical (de la persona gestante al feto, periodo perinatal o neonatal), por transfusiones de sangre o por uso de drogas endovenosas con material contaminado.
Las personas inmunocomprometidas y las infancias tienen mayor riesgo de que al contraer la enfermedad, ésta persista de forma crónica y, provoque daños en el hígado (enfermedad conocida como cirrosis) o cáncer.
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¿Quiénes deben aplicarse la vacuna?
El Calendario Nacional de Vacunación contempla su aplicación a niños y niñas:
- 1era dosis: a los 2 meses de vida
- 2da dosis: a los 4 meses de vida
- 3era dosis: a los 6 meses de vida
- Refuerzo: entre los 15-18 meses de vida