Desde hace varios años, los análisis de tendencias sobre la fuerza de trabajo en salud y del acceso a la educación universitaria y técnico - profesional, muestran una creciente feminización de los profesionales que integran el sector de la salud. Esta tendencia recorre un abanico de profesiones que va más allá de aquellas que históricamente estaban relacionadas con el cuidado o con lo femenino alcanzando a las profesiones sanitarias en su totalidad.

Tomando el caso de la profesión médica, por ejemplo, durante los últimos 10 años el porcentaje de egresadas mujeres supera al de egresados varones en una relación que va en aumento hasta representar al 65% y 35% respectivamente en 2019. También es mayor el número de médicas que ingresan a la formación en servicio a través de una residencia del equipo de salud, aunque en este caso, la elección de la especialidad tiene otro sesgo entre lo masculino y lo femenino, siendo las especialidades quirúrgicas y de cuidados intensivos las más reconocidas como de elección masculina mientras las especialidades no quirúrgicas son elegidas por las mujeres.

La prevalencia de las mujeres también redunda en otras profesiones del equipo de salud, como señalan las tendencias sobre la formación en salud, se registra una mayoría de mujeres en todas carreras analizadas: farmacia, bioquímica, psicología, nutrición, enfermería, obstetricia, fonoaudiología, medicina, kinesiología, odontología. La carrera que guarda una mayor paridad entre sus ingresantes mujeres y varones es Kinesiología con un 54% y un 46% respectivamente y esta relación se mantiene estable en el tiempo.

SI bien históricamente los servicios contaban con una presencia mayoritaria de mujeres entre su personal técnico y operativo, hoy se encuentran también con una mayoría de mujeres profesionales, no solamente médicas sino también del resto de las profesiones sanitarias dando como resultado una feminización profesionalizada (PNUD).

Esta creciente feminización de los profesionales del sector salud, nos interpela a pensar en nuevos desafíos que enfrenta el sector sanitario, tanto como en la definición de una agenda de trabajo con perspectiva de género para la planificación de los recursos humanos del sector.

Este espacio propone recopilar documentos, informes e investigaciones sobre la formación y la fuerza de trabajo de estas profesiones con una mirada en perspectiva de género.