Visitar un área protegida es una excelente opción en cualquier momento del año y sabemos que cada estación tiene su encanto; pero el invierno presenta oportunidades singulares.

En invierno algunas regiones tienen menor ocupación turística, por lo que hay mucho más espacio para disfrutar de la belleza natural. Se come delicioso: vinos, chocolates y platos calientes nos envuelven en el aroma de cada destino. Además, es la estación ideal para practicar actividades de nieve o repetir las habituales sumergidos en la briza helada.

Los paisajes se vuelven únicos. Algunos se tiñen de blanco; en otros, las lluvias de verano disminuyen y se vuelve una oportunidad para conocerlos... y ni hablar de los nuevos Parques Nacionales que abrieron sus puertas al público.

Se acercan las vacaciones de julio en Argentina. ¡Que el frío no te detenga!