Visitamos el Centro de Educación Popular “Isauro Arancibia” para alumnxs en situación de calle
En el marco del programa de fortalecimiento, financiaremos un proyecto de la entidad que propone un espacio de formación y contención para estudiantes en situación de calle.
La ministra Elizabeth Gómez Alcorta visitó el viernes la Escuela Popular y Formal “Isauro Arancibia”, que brinda educación inicial, primaria y secundaria a personas en situación de calle. A través del programa de fortalecimiento institucional, financiaremos el proyecto “(Des)armar el género desde la escuela”, a través del cual se trabajarán contenidos con perspectiva de género, vinculados a la ESI y al abordaje de las situaciones de violencia por motivos de género.
El proyecto que presentó la asociación civil propone generar instancias de reflexión sobre las relaciones de género que permitan cambios significativos para la deconstrucción de mandatos y la construcción de vínculos interpersonales respetuosos, a través de talleres, intercambios, capacitaciones y materiales impresos. Además, problematiza y da cuenta de las diversas miradas sobre esta problemática que conviven en la institución y empodera a sus 300 estudiantes contra la violencia de género.
“Soy fan del Isauro, porque para mí se trabaja desde la pedagogía del amor”, contó Elizabeth Gómez Alcorta durante la ronda de intercambio de experiencias junto a docentes, talleristas y estudiantes. “Queremos poner en valor los saberes populares y fortalecer las redes comunitarias con un abordaje en perspectiva de género”, destacó la ministra.
“Un lugar donde promueven el pensarse desde los deseos tiene una potencia de transformación infinita. Somos un Ministerio militante y eso tiene una particularidad que es que abordamos la construcción de las políticas públicas desde el amor y la sensibilidad”, agregó.
La directora de Articulación Federal y Relaciones Intersectoriales del Ministerio, Agustina González Ceuninck, agregó: “Con este proyecto en particular vamos a trabajar la perspectiva de género dentro de los contenidos educativos en el abordaje de la ESI y de violencia por motivos de género en distintos talleres que se desarrollaran tanto con docentes como con estudiantes”.
Por su parte, la coordinadora del proyecto, Evangelina Aguilar, detalló: “Venimos haciendo un trabajo muy fuerte en relación con pensar las problemáticas de las mujeres, varones y el núcleo familiar en situación de calle. A nuestra escuela asisten familias enteras que traen consigo sus lógicas de vínculos sociales aprendidos, como todos y todas, pero que en este caso son muy particulares porque provienen de las ranchadas. Desde aquí acompañamos e intervenimos ante esa complejidad de esquemas de pensamientos y comportamientos aprendidos en la calle”.
Sobre la propuesta educativa del Isauro, la docente y coordinadora del secundario, Laura Cestona, relató la experiencia de construcción colectiva y participativa de maestrxs y alumnxs. “Esta escuela de múltiples niveles y modalidades fue construida a partir de les sujetes pedagógicos que le dan sentido. Se levantan de una vereda y vienen a estudiar y desde ese lugar nos desafían a construir una escuela que esté a la altura de sus necesidades, derechos y sueños. Aquí no solo alojan sus cuerpos sino también sus proyectos. Tratamos de acompañarlos para que los lleven adelante”, sintetizó.
Acerca de los talleres de educación sexual integral y perspectiva de género, Mariana Alejandra Vázquez, trabajadora social afirmó: “Me parecen fundamentales. Es muy importante brindar herramientas que tengan que ver con el cuidado del cuerpo y de la persona de una manera integral. Abordar cómo vincularse con los otros, cómo vivir la sexualidad, tanto en niños como adultos. Para muchxs, es la primera vez que se encuentran ante estos temas. Entonces es, además, una posibilidad de trabajar para derribar mitos, estereotipos que están muy instalados en su población y en su comunidad”.
Además de los tres niveles educativos, la propuesta formativa del Isauro Arancibia ofrece jardín maternal para lxs hijxs de lxs estudiantes, cursos de oficio y talleres de arte y comunicación. En el mismo espacio, también dan asistencia alimentaria a las familias.