Siniestralidad Vial 2020
- En 2020 murieron 3138 personas en siniestros viales
- Por día, 8.5 fallecidos
- Cada 100 mil habitantes, tasa de 6.9
- Los varones, de entre 15 y 34 años, fueron las víctimas más numerosas.
- Entre los diferentes tipos de usuarios, los motociclistas fueron los más afectados.
- Por cantidad de fallecidos, las provincias de buenos aires, santa fe, córdoba y tucumán lideran la estadística. Por tasa de fallecidos cada 100 mil habitantes, las provincias de noa y nea presentan los registros más altos.
Declaraciones del Ministro de Transporte Mario Meoni
Estas cifras son el lado positivo de las restricciones de circulación que nos trajo la pandemia y, sobre todo, son personas que hoy siguen con nosotros y familias que no están sufriendo una pérdida. Si queremos mantenerlas debemos ser muy responsables a la hora de circular, respetando la velocidad máxima, no consumiendo alcohol y usando el cinturón de seguridad, no solamente quienes se mueven en automóviles. Todas las personas que viajen en micros o minibús también deben usarlo porque, además de ser obligatorio, es la forma de cuidar su vida. Nosotros vamos a seguir controlando como hemos hecho durante esta temporada, donde ya fiscalizamos más de 103.000 vehículos, porque nuestro objetivo siempre es cuidar la vida de las personas.
Declaraciones del Director de la ANSV, Pablo Martínez Carignano
En primer lugar, quiero reconocer a las 23 Provincias y a la ciudad de Buenos Aires por el gran trabajo de sus Observatorios Viales: que al 14 de enero tengamos consolidadas las estadísticas oficiales del año anterior es algo que nunca había sucedido en la Argentina y demuestra que el trabajo federal y comprometido es el camino a seguir.
Sobre lo que indican los números, dos reflexiones. Por un lado, la reducción casi a la mitad de los fallecidos implica más 2000 vidas salvadas y decenas de miles de heridos que se evitaron: hoy hay muchas familias argentinas que no lloran por la pérdida de un ser querido y eso no tiene precio. Por otro, la certeza de que no hay que confundirse con esta caída: el descenso obedeció fundamentalmente a la restricción de la circulación, sobre todo en el comienzo de la pandemia, y no a un cambio cultural de los usuarios. Para adelante debemos seguir trabajando con ese objetivo, para que en Argentina haya más educación vial, más controles, más campañas, mejores vehículos, mejor infraestructura y mejores leyes, para que la nueva normalidad no sea un retorno a las estadísticas de años anteriores. En suma, para que la seguridad vial no sea un tema privativo de especialistas, funcionarios o familiares de víctimas sino para que integre la agenda de todas las familias argentinas y esté entre sus preocupaciones centrales ya que, insisto, nada mata más jóvenes en nuestro país que los siniestros viales.