Se dio a conocer la nueva edición del Informe del estado del ambiente
El mismo agrupa la información ambiental de 2017 para temas como agua, biodiversidad, cambio climático, bosques, suelos y actividades productivas, entre otros.
Por segundo año consecutivo, el Informe del estado del ambiente, en su edición 2017, fue presentado por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación. El trabajo, que reúne información clave sobre la situación ambiental del país para ese año, fue dado a conocer por Sergio Bergman.
Durante la presentación, realizada en Cancillería, Bergman destacó “la responsabilidad y el privilegio de llevar adelante la agenda ambiental que el presidente Mauricio Macri encomendó” y se refirió al informe: “Demuestra la solidez y la consistencia de sentar bases de acciones institucionales de políticas públicas que nos trasciendan y que los informes que nosotros damos están acompañados por acciones institucionales que le dan sostenibilidad en el tiempo, trabajando siempre de manera federal con las provincias que son, no solo autónomas sino soberanas de los recursos naturales y la fuente de información que colectamos”.
“Nuestro eje de trabajo es la Agenda 2030 con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible porque entendemos que sus indicadores son transversales al ambiente y registran el impacto antrópico de otras actividades. Siendo el área ambiental el termómetro indicador sobre el cual tenemos que tener una visión más holística e integral”, continuó Bergman y explicó: “Porque en el marco del desarrollo sostenible tenemos que cambiar el concepto para hacer las cosas de diferente manera, para avanzar en lo que es la innovación tecnológica, que es lo único que va a permitir que la rentabilidad y la sustentabilidad se complementen y así, esto que estamos dando como información de registro de datos, sea un insumo para el cambio de la matriz energética, productiva y de infraestructura”, señaló Bergman.
“Estos datos nos inspiran y empoderan para poder asumir que el recurso natural que tenemos es un don en el desarrollo sostenible, una oportunidad para que todos los argentinos tengamos un lugar. Y que nos insten a que a nadie le falte la dignidad del pan, del trabajo, de la salud, de la educación, que son los derechos humanos que instituye nuestra Constitución”, reflexionó el Secretario de Gobierno.
“Desde que asumimos esta gestión nos comprometimos a decir la verdad y a transparentar la información pública para saber desde dónde partimos. Conocer es fundamental para hacer lo que hay que hacer”, explica Bergman en el prólogo. Más adelante también señala: “Necesitamos datos e indicadores, como los de la presente publicación, que nos permitan abordar las diferentes problemáticas ambientales y diseñar políticas a partir de la solvencia científica y la validez técnica, pero sin perder de vista que buscamos aportar soluciones que se inscriban en la dimensión ética, dentro de una política de derechos humanos”.
Cabe señalar que el informe se presenta por tercera vez a la ciudadanía, en cumplimiento de una de las obligaciones anuales que establece la Ley General del Ambiente 25675 —sancionada en 2002— para el Ejecutivo nacional. En su primera oportunidad, fue confeccionado recién en 2012, con diez años de mora en relación a dicha sanción.
En ese sentido, Diego Moreno, Secretario de Política Ambiental en Recursos Naturales, señaló: “Asumimos el compromiso de desarrollar un sistema de estadísticas ambientales a nivel nacional y darle continuidad a la presentación del Informe sobre el estado del ambiente, contemplado en la Ley General del Ambiente que nos obliga a presentarlo anualmente. Esta es la primera vez que se presenta en dos años consecutivos y la tercera desde que la normativa está vigente, es un hecho muy relevante ya que de esta manera transparentamos los datos ambientales”.
“En esta línea hemos lanzado varias iniciativas, entre ellas las plataformas de Datos Abiertos de Ambiente y Desarrollo Sustentable y la de Ambientes Bosques, que concentra toda la información vinculada a la gestión de la Ley de Bosques; el Sistema de Información Forestal y el Sistema de Administración, Control y Verificación Forestal (SACVeFor), que está online y operativo en varias provincias y esperamos alcanzar a todo el país. Asimismo estamos avanzando en el Segundo Inventario de Bosques Nativos y los trabajos para el inicio de un inventario de humedales y ya publicamos el Inventario Nacional de Glaciares”, concluyó Moreno.
El trabajo se puede descargar completo en la web de Ambiente, Informe 2017. También se presenta en dos formatos de difusión complementarios: una versión resumida impresa, que contiene una selección de la información más relevante de cada capítulo, y una versión web sintética, que permite una navegación ágil por los principales hallazgos del informe.
Aspectos destacados del informe 2017
Glaciares. Se completó el Inventario Nacional de Glaciares, que muestra que Argentina —con 16.968 cuerpos de hielo que ocupan 8.484 km2— es el segundo país de América Latina en cantidad de glaciares. Asimismo, está entre los 15 países del mundo con mayor superficie de hielo.
Humedales. Por otra parte, el país amplió su lista de humedales de importancia internacional y sumó un nuevo sitio Ramsar: la Reserva Natural Villavicencio, en Mendoza, con una superficie de 62.244 hectáreas (ha). El país ya cuenta con 23 sitios Ramsar que abarcan en total 5.687.651 ha.
Áreas naturales protegidas. Se contabilizaban 483 áreas naturales protegidas, alcanzando una superficie terrestre protegida de 366.851,81 km2, el 13,14 % de la superficie del sector continental americano del país. Respecto a los espacios marítimos argentinos, que abarcan 2.404.000 km2, su superficie protegida es de alrededor de 2,4 % —o de 3,2 % aproximadamente si se consideran las porciones terrestres de los espacios protegidos costeros marinos—.
Bosques. El Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos adjudicó $ 556.500.000 en 2017, el monto de inversión más alta desde la sanción de la Ley de Bosques. Por otra parte, la pérdida de tierras forestales para ese año fue de 172.639 ha.
Biodiversidad. Se publicó la categorización de aves de Argentina según su estado de conservación, encontrándose 18 especies “en peligro crítico de extinción”, entre ellas el loro vinoso (Amazona vinacea) y el cauquén colorado (Chloephaga rubidiceps). Además, otras especies se categorizaron “en máximo riesgo de extinción”, como la mojarra desnuda (Gymnocharacinus bergii).
Suelos. Más de 100 millones de ha del territorio argentino están afectadas por erosión, cuyo avance se produce a razón de unos 2 millones de ha por año. La pérdida de suelo trae aparejado un impacto negativo sobre la productividad de los cultivos, cuyas estimaciones rondan los USD 29,9 millones anuales. Ese valor, estipulado para soja, maíz y trigo es de naturaleza acumulativa y, en diez años, puede escalar a USD 1.645 millones.
Cambio climático. Se creó el Observatorio de Cambio Climático, destinado a generar tecnologías de monitoreo para transmitir información y procesar datos que permitirán adoptar medidas predictivas y analíticas. Se aprobaron y presentaron tres planes sectoriales relacionados al tema: bosques, transporte y energía. De esta manera, el país espera alcanzar su meta incondicional de no exceder las 483 mega toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2eq) para 2030, mientras que, si se accediera a tecnología y financiamiento, se apuntaría a una meta condicional de no exceder las 369 MtCO2eq. Esto significaría, respectivamente, la reducción del 18 %, en un caso, y del 37 %, en el otro, de las emisiones de gases de efecto invernadero en relación a su escenario tendencial.
Residuos. La composición de residuos sólidos urbanos fue la siguiente: material orgánico 43 %, papel y cartón 14 %, plásticos 13 %, textiles 6 %, vidrios 4 %, metales 2 % y otros materiales 18 %. Se espera que con la Ley 27279 —de gestión de envases, sancionada en 2017— se optimice la producción de material reciclado. Asimismo, se reglamentaron las condiciones de almacenamiento de residuos peligrosos para el generador, el operador y las plantas de tratamiento y disposición final.
Energía. Se produjeron algunos cambios en la matriz energética argentina: menos petróleo, más gas y renovables. Se destaca que en la oferta interna de energía el 53,6 % provino del gas natural, 32 % del petróleo y 1,3 % del carbón. El 13 % restante fue aportado por otras fuentes (hidroeléctrica 4,1 %, nuclear 2,8 % y renovables 6,3 %).
Energías renovables. Se adjudicaron 147 proyectos de generación de energía, con una potencia de 4.466,5 MW y un precio promedio ponderado de USD 54,72/MWh. La producción de bioetanol se incrementó de 23.000 m3 en 2009 a más de 700.000 m3 en 2016.
Forestoindustria. Las plantaciones forestales alcanzaron 1.350.442 ha y comprende en su mayoría especies exóticas de crecimiento rápido. Las provincias de Corrientes, Misiones y Entre Ríos representan alrededor del 85 % del total forestado. La argentina genera 13 millones de m3 anuales de madera rolliza. El 60 % se destina a las industrias de tableros y aserrado, el 40 % restante corresponde a pasta celulósica, papel y cartón.
Agroindustria. Argentina es el segundo país con mayor superficie bajo producción orgánica, luego de Australia. En 2016, se estimaron 3 millones de ha bajo seguimiento orgánico, de las cuales 2,6 (93 %) se destinaron a la producción ganadera y 224 mil hectáreas (7 %) a la producción vegetal. Del total de tierras orgánicas destinadas a la producción ganadera el 75 % se encuentra en la Patagonia y corresponde a producción ovina extensiva.
Pesca. La extensa red fluvial de Argentina y su plataforma continental — alrededor de 6.600.00 km2 —, así como la extensión de la costa —casi 5.000 km — le otorgan al país un enorme potencial pesquero y acuícola. Esta actividad representó el 0,3 % del PBI en 2017.