Se amplía la edad máxima para que los pilotos realicen operaciones aéreas
Con la publicación de la Resolución N° 516/2024 en el Boletín Oficial, se establece una extensión de la edad máxima permitida para que los pilotos puedan continuar realizando operaciones aéreas, abriendo nuevas oportunidades tanto para los profesionales como para el sector aeronáutico en general.
La resolución, firmada por la interventora de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), María Julia Cordero, modifica la Parte 61, Sección 61.3 (h), de las Regulaciones Argentinas de Aviación Civil (RAAC). A partir de ahora, en el caso de las operaciones aéreas nacionales, la edad máxima para vuelos que requieran un solo piloto se eleva de 60 a 66 años. En tanto, para las aeronaves que necesiten dos pilotos, la edad máxima sube de 65 a 68 años.
En cuanto a las operaciones aéreas internacionales, se deberán respetar las limitaciones de edad establecidas por la normativa vigente en cada país en el que se opere.
Esta actualización responde al aumento de la esperanza de vida y a la creciente demanda de pilotos en el mercado aeronáutico, lo que hace necesario modificar la edad límite para que los pilotos puedan seguir operando, siempre que cumplan con los requisitos de conocimientos, experiencia y pericia exigidos por la Autoridad Aeronáutica.
Asimismo, esta medida se alinea con las tendencias internacionales, donde diversas normativas aeronáuticas han flexibilizado las edades de jubilación y continuidad laboral, permitiendo una mayor extensión en la edad límite para que los titulares de una licencia de piloto puedan ejercer sus funciones en operaciones de transporte aéreo comercial.
La modificación de la normativa contribuirá al incremento de pilotos disponibles en el mercado y optimizará los recursos humanos en el sector, adaptándose a las nuevas dinámicas del mercado laboral global.
Con esta medida, la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía de la Nación reafirma su compromiso con la seguridad, el progreso y la competitividad del sector aeronáutico, marcando un paso importante hacia la adaptación de la normativa a las necesidades y realidades actuales.