Recomendación sobre sanidad e inocuidad en las producciones de la agricultura familiar
Fue oficializada por el Consejo del Mercosur, que insta a reconocer a la actividad como objeto de políticas públicas de carácter sanitario.
Buenos Aires - Se oficializó la “Recomendación sobre Sanidad e Inocuidad de las Producciones de la Agricultura Familiar” declarada por el Consejo del Mercado Común (CMC) del Sur, Mercosur (punto 8 del Acta 3/2021).
Previo a la reunión del CMC, el análisis de la Recomendación se realizó de manera virtual en diciembre de 2021 con la participación de profesionales pertenecientes a los ministerios nacionales de Agricultura, Ganadería y Pesca (MAGyP), de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, de las coordinaciones de Relaciones Internacionales (CRI) y de Agricultura Familiar (CAF) del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y de los servicios homólogos de los países del Mercosur.
En la Recomendación se insta a los Estados Partes a reconocer a la agricultura familiar como objeto de políticas públicas de carácter sanitario, implementando políticas específicas que promuevan el cumplimiento de las normas sanitarias y de inocuidad, así como la revisión y adecuación de los requisitos higiénico sanitarios al tipo y escala de producción familiar, a fin de dar garantías sobre los alimentos que produce, elabora y comercializa.
A raíz de ello, se recomienda a los Estados parte diseñar políticas públicas en este sentido, fortalezcan sus organismos fitozoosanitarios, estableciendo áreas de trabajo específicas que aborden al sector de la agricultura familiar y se promueva el intercambio regional de productos y alimentos de la agricultura familiar y cooperativa.
El proyecto de recomendación fue elevado en septiembre de 2021 en el marco de la VIII Reunión Especializada de Agricultura Familiar (REAF) del Mercosur mediante el acta firmada por el secretario de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena (SAFCI) del MAGyP, Miguel Ángel Gómez.
En tal sentido, Gómez resaltó que “los gobiernos necesitamos construir herramientas comunes que fortalezcan la producción de la agricultura familiar, campesina, indígena y de la pesca artesanal. Estas herramientas tienen que diseñarse, planificarse y ejecutarse en pos de garantizar alimentos sanos para nuestros pueblos, que sean producidos en forma sostenible, en cantidad, y con calidad sanitaria".
La Argentina viene trabajando dentro de la REAF para posicionar el tema de los aspectos sanitarios y de inocuidad como uno de los ejes clave para el desarrollo integral del sector de la agricultura familiar.
“El intercambio de experiencias y de criterios sobre la inocuidad con el resto de países genera acuerdos, construye capacidades para distintos técnicos y para organizaciones de la agricultura familiar”, dijo la coordinadora de Agricultura Familiar del Senasa, Lucía González Espinoza.
Agregó que: “Las recomendaciones son un instrumento clave sobre el que se trabaja desde la REAF, que se construyen sobre la base de la discusión de temas priorizados entre países. Las recomendaciones, una vez aprobadas por el Grupo de Mercado Común (GMC), son una guía orientativa para los países a la hora de diseñar y ejecutar políticas públicas para el sector”.
“Esta recomendación nos permitirá como país avanzar en el trabajo que venimos realizando desde el Senasa junto al MAGyP. La adecuación de los programas sanitarios y la actualización de las normativas de inocuidad alimentaria requieren de tareas coordinadas entre los que conformamos el sistema nacional de control de alimentos. Si los países del Mercosur nos ponemos de acuerdo en esto es un gran avance y apoyo para los servicios sanitarios. A nivel regional se toman muchas definiciones sanitarias importantes y esta es una más”, completó González Espinoza.
Por su parte, el secretario técnico de la REAF, Lautaro Viscay, sostuvo que, como órgano formal del Mercosur, la REAF debe trabajar en base al diálogo sobre políticas públicas para la Agricultura Familiar. “Los servicios sanitarios de los países de la región son actores claves y relevantes para que las producciones del sector se proyecten y los productores y productoras desarrollen su potencial. A partir de la recomendación, trataremos de avanzar en una mayor participación de los agricultores y agricultoras familiares y junto a la institucionalidad sanitaria, coorganizar actividades y una agenda de cooperación que permitan mayor inclusión, formación y oportunidades para la agricultura familiar del Mercosur”, completó.