Con juegos, narraciones y mucha imaginación, a través de El Bellas Artes en Casa, el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) invita a chicos, chicas y sus familias a conocer sus colecciones.

“Al poder explorar el material antes de venir al museo, las expectativas se acrecientan. Además, las propuestas están disponibles para toda la comunidad. Es decir, aquellos que por razones geográficas están lejos del Museo, también pueden “acercarse” online y conocer la colección”, explica Silvana Varela, miembro del equipo de Educación del MNBA.

La idea de implementar El Bellas Artes en Casa estaba presente en el equipo de Educación, pero fue la pandemia la que aceleró su puesta en marcha. “Sentimos la urgencia de acercar el Museo a las familias cuando el edificio estaba cerrado. Fue una manera de “entrar” en los hogares y de acompañar en un momento tan difícil”, destaca Varela.

Hay una diversidad de propuestas dirigidas a diferentes edades. Además de los materiales que se pueden descargar desde El Bellas Artes en Casa, hay una sección que se denomina Escuchando cuadros, mirando relatos, con videos donde la narradora Roxana Pruzan relata cuentos vinculados con las obras de la colección. Luego de cada narración, como en los demás materiales, se proponen actividades para realizar en casa.

Una de las actividades que se puede hacer desde casa, es Explorando las emociones en donde, a través de obras y de las historias de sus autores, pueden reconocerse diferentes estados de ánimo. Todas las actividades son gratuitas y pueden descargarse o realizar en línea.

Para amantes de las mascotas, 1, 2, 3 perros en el museo… esta vez invita a descubrir animales en diferentes obras.

También hay propuestas para docentes y para estudiantes de colegios secundarios.

El MNBA cuenta con las siguientes propuestas para explorar el museo de manera presencial en familia:

Sueño de una tarde en el museo

Roxana Pruzan trabaja con un títere, Lila. Ambas nos invitan a conocer a algunos de los artistas de la colección del museo. Cuentos y obras se funden en un recorrido diferente.

Misión espacial

Gisela Witten, Inés Alvarado, Pablo Hofman y Lucía Ivorra proponen a niñas y niños convertirse en artenautas. En este recorrido los educadores invitan a descubrir fenómenos del universo, como constelaciones y satélites, representados o sugeridos en algunas de las obras del museo. Éstas, ubicadas en las salas del siglo XX, serán el punto de partida para imaginar y crear.

Todas son actividades participativas para chicos de 5 a 10 años.

“La finalidad que tiene todas las propuestas es la de difundir nuestra colección que es muy rica. La idea es que a través del jugo, la imaginación, la participación, las infancias puedan explorar y conocer las obras que forman parte del patrimonio nacional. También nos interesa contribuir a la formación de un pensamiento crítico en los niños y niñas al imaginar las obras en sus contextos y descubrir así la importancia de las imágenes y los diferentes sentidos que despliegan”, rescatan desde el equipo de Educación del Museo.