Presentaron un libro sobre el Almirante Manuel José García – Mansilla
El marco elegido fue el buque museo fragata ARA “Presidente Sarmiento”.
Buenos Aires - “Manuel José García - Mansilla, El llamado del mar”, es el nombre de la obra escrita por el Capitán de Navío (RE) y Doctor en Historia Guillermo Oyarzábal, y cuya presentación se llevó a cabo ayer por la tarde en el buque museo fragata ARA “Presidente Sarmiento”.
En el acto estuvieron presentes el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Almirante Carlos María Allievi; el Secretario General de la Armada, Contraalmirante Enrique Antonio Balbi y el Director de la Escuela Naval Militar, Contraalmirante Pablo Germán Basso, entre otras autoridades navales.
Asimismo, asistieron cadetes de la Escuela Naval Militar e integrantes de la familia García – Mansilla.
Durante la apertura, el director del buque museo, Capitán de Corbeta Sebastián Morán, señaló que de alguna manera ese navío materializaba “la visión de aquellos marinos de la Generación del 80, de la cual el Almirante García - Mansilla es uno de los más conspicuos exponentes”. De esa manera remarcó el vínculo entre la fragata y el marino notable biografiado.

La mesa de presentación estuvo conformada por el Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Gustavo Fabián Lioi Pombo; el Comodoro de Marina Manuel Rafael García – Mansilla -bisnieto del marino- y el Capitán de Navío Oyarzábal, escritor de la obra lanzada por la Editorial Virtudes y el Instituto de Publicaciones Navales.

El Contraalmirante Lioi Pombo señaló que la biografía del Almirante García - Mansilla era en realidad “la historia de nuestra Marina en una etapa fundacional”, contada a través de la vida de ese marino que desde muy joven visualizó que la Armada debía evolucionar en la línea tecnológica. Remarcó además que, ante los desafíos complejos en la geopolítica del Atlántico Sur de esa época, transformó la idea de una Armada defensiva a una de capacidad de combate oceánico. Después de resaltar su protagonismo en nuestra historia, le expresó al Capitán Oyarzábal que, más que un libro, dejaba “un acto de justicia hacia la persona de este almirante”.

Por su parte, el Comodoro de Marina García – Mansilla manifestó que con este libro se pretendía honrar el valor del ejemplo y el legado de ese marino ilustre, quien fuera el Jefe del Estado Mayor de la Marina más joven de la historia. Asimismo, comandó la Flota de Mar en varias oportunidades y fue Director de la Escuela Naval Militar durante una década.

Respecto a la obra histórica, fruto de dos años de investigación, destacó que no solo reconstruye los hechos más relevantes de la vida del marino “que encarnó la plenitud del ideal naval”, sino que, además, “ilumina el espíritu de una época”. Al igual que el Contraalmirante Lioi Pombo, remarcó que esa biografía no era solo un homenaje, sino “un acto de justicia histórica. Porque recordar a quienes sirvieron con honor es afirmar los valores permanentes que fundan la identidad naval: el deber, la lealtad, la disciplina y el amor a la misión”.

Finalmente, el Capitán de Navío Oyarzábal se refirió al Contraalmirante García- Mansilla como uno de los marinos de la Generación del 80, la de la consolidación del país, que “transformó la Marina hasta convertirla en una moderna”. Detalló que perteneció a un grupo de hombres como Santiago Albarracín y Félix Dufourq, recibidos de la Escuela Naval Militar entre 1879 hasta 1881, que “con la convicción de transformar la realidad de manera positiva” crearon el Centro Naval; siendo él elegido su primer presidente.

Desde ese ámbito se promovieron las discusiones profesionales y científicas y, por idea suya, se creó el Boletín del Centro Naval en 1882, como un órgano de difusión de ideas; publicación que en poco tiempo se convirtió “en una revista de primer nivel leída por la dirigencia política” del país. Habían “conceptos y valores principales que fueron impuestos por García- Mansilla”, subrayó el Capitán Oyarzábal y agregó que su preocupación principal estaba marcada por el adiestramiento, la táctica, la disciplina y la camaradería, y “por una Marina que proyecte sus intereses y acción más allá de la larga línea costera”, en concordancia con el pensamiento naval de Alfred Mahan.
Destacó el autor del libro que en 1895 se produjo una transformación brusca a nivel institucional cuando, como Capitán de Fragata y con 36 años, fue nombrado Jefe del Estado Mayor General de la Armada, siendo “el más prestigioso, el más reconocido y el más científico de todos los oficiales de la Marina”.
A modo de reflexión y cierre de sus palabras, el Capitán Oyarzábal indicó: “Este es un libro que tienen que leer los oficiales jóvenes, como todos los libros que hablan de nuestra Marina. Porque en estos libros que son los de historia, es decir, que son los de la reflexión sobre el presente, van a encontrar las herramientas para tomar mejores decisiones en el futuro”.
