Presentaron en la ex ESMA el Informe Final de la Comisión de la Verdad de Colombia
“Hay futuro si hay verdad” es el título del informe que busca esclarecer las causas y consecuencias del conflicto armado que atravesó Colombia durante más de seis décadas, con el objetivo de dignificar a las víctimas y sentar las bases para la construcción de una paz duradera.
El trabajo fue presentado esta tarde en el auditorio del Centro Cultural de la Memoria “Haroldo Conti” por dos de los miembros de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición, Carlos Martín Beristain y Saúl Franco, con la participación del secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti, y la directora ejecutiva de Memoria Abierta, Verónica Torrás, quien abrió el encuentro.
La visita de la Comisión se enmarca en la gira internacional que se inició el 28 de junio con la presentación del informe en la ciudad de Bogotá, de la que participaron el presidente electo de Colombia Gustavo Petro, víctimas del conflicto armado, organizaciones de la sociedad civil y miembros de instituciones gubernamentales.
En la apertura de la ceremonia, en un auditorio colmado por unas 300 personas pertenecientes a organizaciones de derechos humanos y exiliadas y exiliados colombianos, el secretario Pietragalla Corti destacó “el gran trabajo realizado por la Comisión en aras de conocer la verdad de lo ocurrido durante el conflicto armado interno y contribuir con el esclarecimiento de las violaciones de derechos humanos e infracciones del derecho humanitario internacional”.
En ese sentido, expresó el deseo de que “en esta nueva etapa esperanzadora que se abre en Colombia, la política de memoria vaya de la mano de cambios en el modelo económico y social que permitan que las causas sociales del conflicto poco a poco se vayan resolviendo”.
Por su parte, el comisionado Saúl Franco sostuvo que “en este informe no está la verdad del Estado ni de las organizaciones armadas ni paramilitares, sino de las víctimas de la guerra en Colombia”.
“En Colombia hubo una guerra de por lo menos 60 años, con consecuencias demoledoras sobre la vida, la democracia, la naturaleza y la cultura”, aseguró, y agregó que “el porqué de esta guerra fue una de las preguntas de fondo de esta investigación: hubo una confrontación de intereses políticos y económicos muy fuerte; lucha por la tierra, por la posesión de la riqueza, por imponer una ideología en la sociedad; el narcotráfico infiltró toda la sociedad, a la guerrilla, al estado, y sigue siendo un factor de persistencia del conflicto armado”.
En ese sentido, Franco destacó que es imperioso “trabajar por la paz grande: es necesario negociar con todos los actores involucrados. La paz grande necesita que sea el compromiso de toda la ciudadanía y los gobiernos que vengan”.
En tanto, Carlos Beristain, comisionado que trabajó en el eje Exilio de la Comisión, definió al informe como “una palanca para el cambio de los próximos veinte años en Colombia”.
El comisionado explicó que “si hay un factor de persistencia del conflicto es el negacionismo. Muchas veces se han creado memorias defensivas que justifican la violencia”.
“El exilio colombiano ha sido invisible; hay una tendencia a despolitizar el exilio, de concebirlo como una migración. Este informe apunta a su visibilización”, aseguró Franco, y agregó que “la deuda del Estado colombiano es reconocer que el exilio es una violación de derechos humanos”.
Al dar la bienvenida al encuentro, Verónica Torrás contó que “la presentación de este trabajo se propone como un espacio para compartir ante la comunidad de derechos humanos y autoridades, y víctimas de exilio colombiano los hallazgos de la comisión”.
Durante el encuentro, los comisionados compartieron su experiencia de 3 años de trabajo en los que recogieron más de 30 mil testimonios en todo el territorio de Colombia y en 23 países con un firme compromiso en torno a la verdad.
Asimismo, presentaron los principales hallazgos obtenidos a lo largo de su investigación hacia el esclarecimiento de lo ocurrido durante el conflicto armado colombiano, y las recomendaciones propuestas para la No Repetición, como un legado para toda la sociedad y para las nuevas generaciones.
Los expositores valoraron la política de Derechos Humanos de Argentina como una referencia. En particular la tarea de la Secretaría de Derechos Humanos como sede de la presentación del informe, así como el trabajo realizado desde este organismo junto a la red de víctimas que permitió capacitar a quienes llevaron adelante la recepción de los testimonios de las y los exiliados colombianos en el país y el cono sur.
El informe “Hay futuro si hay verdad” está conformado por diez volúmenes que abordan las diferentes dimensiones de lo que representó el conflicto armado y sus consecuencias. A partir de la labor de análisis y contrastación de la información, la Comisión estableció que, al menos, 450.666 personas perdieron la vida; 121.768 fueron víctimas de desaparición forzada; 50.770 fueron secuestradas; 16.238 niñas, niños y adolescentes fueron reclutados; y 32.446 personas fueron víctimas de actos en contra de la libertad y la integridad sexual; entre otras violaciones a los derechos humanos. Además se incluye un capítulo sobre exilio, que habla de que más de un millón de colombianos y colombianas debieron salir del país para proteger sus vidas.
La publicación marca el final de la tarea que desarrolló la Comisión, creada en el marco del Acuerdo de Paz con la guerrilla de las FARC-EP del 24 de noviembre de 2016, con el mandato de avanzar en “el esclarecimiento de los patrones y causas explicativas del conflicto armado interno que satisfaga el derecho de las víctimas y de la sociedad a la verdad, promueva el reconocimiento de lo sucedido, la convivencia en los territorios y contribuya a sentar las bases para la no repetición, mediante un proceso de participación amplio y plural para la construcción de una paz estable y duradera”.
En el Informe se destaca la solidaridad internacional con el trabajo de la Comisión, en particular el apoyo del Sistema de Naciones Unidas y todas sus agencias, del secretario general, el Consejo de Seguridad, la Misión de Verificación y el Fondo Multidonantes; y el respaldo claro del papa Francisco, entre cientos de países de la región y del mundo.
También estuvieron presentes integrantes del Nodo de Trabajo Argentina, coordinado por Diana Ortiz, que tuvo a su cargo la toma de testimonios a exiliados y exiliadas colombianas, junto a testimoniantes de diferentes lugares del país, y organizaciones sociales que colaboraron con la Comisión.
Compartimos la presentación completa: