En la Biblioteca Nacional se llevó a cabo el lanzamiento de la edición N° 11 del concurso nacional de promoción de la lectura: Premio VIVALECTURA. Este certamen, que se realiza todos los años con la participación de Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), la Fundación Santillana, fue creado por medio de la Resolución Ministerial Nº 649 del Ministerio de Educación de la Nación en 2007.

Este año cuenta también con el apoyo del Ministerio de Cultura de la Nación, la participación de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) y la Asociación de Literatura Infantil y Juvenil (ALIJA).
Su objetivo es estimular y rendir homenaje a las experiencias más destacadas en materia de promoción de la lectura a través de sus múltiples formas que provienen de todo el país. Se trata de experiencias que transcurren en la escuela, en una biblioteca popular, impulsadas por organizaciones civiles o proyectos de investigación o extensión de universidades.

Durante el acto de lanzamiento participaron autoridades nacionales; docentes; promotores de lectura; escritores; referentes de escuelas y organizaciones sociales; se presentó un panel con las experiencias ganadoras 2017. Estos proyectos dan cuenta de la innovación y esfuerzo que realizan escuelas y organizaciones por lograr que la lectura y la comprensión lectora se consoliden como la competencia clave para acceder al conocimiento, despertar la creatividad y las ganas de aprender.

El secretario de Gestión Educativa, Max Gulmanelli afirmó que en el desafío de promover la lectura son fundamentales los testimonios que conmueven. “Y certámenes como el Premio VivaLectura nos permite mostrar testigos de la lectura, ver que los chicos sí leen, sí crean, sí investigan, tal como pudimos constatarlo en la Feria Nacional de Innovación Educativa hace unos días, lo que necesitan los jóvenes es un mundo adulto de referencia.”

Andrés Gribnicow, Secretario de Cultura y Creatividad del Ministerio de Cultura de la Nación, habló de la importancia de renovar las bibliotecas y empoderar las experiencias que proponen nuevos formatos de lectura para acercar los libros a los niños, niñas y jóvenes en las escuelas y a la comunidad.

Se trata de crear más espacios enriquecidos para formar ciudadanos lectores, desde la infancia hasta el abordaje de textos más complejos que nos permitan ser participantes activos en los ámbitos culturales, laborales y cívicos de la comunidad.

En este sentido, Mariano Jabonero, director de Educación de la Fundación Santillana, destacó que cada vez es mayor la participación en este certamen, con proyectos provenientes de todo el país.

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