París 2024, los Juegos de la igualdad
En el año de los primeros Juegos Olímpicos de la historia con paridad de género, repasamos testimonios de deportistas argentinas por el Día Internacional de la Mujer.
Hace 124 años, en París, las mujeres estuvieron presentes por primera vez en los Juegos Olímpicos y, este año, en esa misma ciudad se desarrollarán los primeros Juegos con paridad de género de la historia. Desde la medalla plateada en Jeanette Campbell (100m pecho) en Berlín 1936, nuestras atletas han dejado su marca en esta competencia.
"Estamos a punto de celebrar uno de los momentos más importantes en la historia de las mujeres en los Juegos Olímpicos y en el deporte en general. Esto es resultado de los enormes esfuerzos realizados por el Movimiento Olímpico y las pioneras, es nuestra contribución a un mundo con mayor igualdad de género”, afirmó Sebastian Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional.
"Las mujeres vienen avanzando desde hace tiempo y se están reconociendo sus esfuerzos. Pero aún queda un largo camino por recorrer, debemos ocupar más lugares de liderazgo en diferentes áreas. Hoy en día las mujeres estamos alentadas a expresarnos libremente y ser líderes", afirmó la ex jugadora de hockey Luciana Aymar, máxima medallista argentina en Juegos Olímpicos, en declaraciones a la FIH.
Solo el 2,2 por ciento de los participantes en los Juegos Olímpicos de París 1900 fueron mujeres, ese número fue aumentando gradualmente y ha acelerando su ritmo a partir de Los Ángeles 1984 (23%); en Londres 2012 fue del 44%; y en Tokio 2020 del 48%. Además de la paridad en las competencias, el COI busca la paridad también en su organismo dónde el 41% de sus miembros hoy son mujeres.
Los tiempos cambian y las deportistas también, cada vez son más las mujeres que siguen compitiendo en el alto rendimiento luego de ser madres y los Juegos Olímpicos no son la excepción. "No es fácil combinar la maternidad con el deporte, pero estoy mostrando que con muchos esfuerzo se pueden lograr los sueños y cualquier cosa que uno se proponga", expresó Florencia Borelli, madre de Milo (12) y primera medallista argentina en el maratón panamericana femenina en Santiago 2023.
Los Juegos Olímpicos son la gran vidriera del deporte mundial y sus atletas generan un efecto multiplicador para que cada vez más personas incorporen a la actividad deportiva. "La verdad que para nosotras es un orgullo y un honor saber que nosotras dejamos un legado para Argentina. Inspirar a qué más chicas se sumen a nuestro deporte es de las cosas más lindas que podemos aportar", afirma Lucila Balsas, jugadora del seleccionado femenino de beach handball y medalla dorada en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018.