El concepto “parto respetado” o “parto humanizado” hace referencia a una atención del parto caracterizada por el respeto a los derechos de madres, padres y recién nacidos durante el momento del nacimiento, en consonancia con sus necesidades y deseos.

¿Cuáles son esos derechos?

La Ley N° 25.929 de Parto Humanizado y su reglamentación (Decreto 2035/2015) garantiza un espacio familiar donde madres, padres y bebés sean los protagonistas de este momento único y especial.

La madre tiene derecho:

• A ser informada sobre las distintas intervenciones médicas que pueden tener lugar durante el parto y postparto, y a participar activamente de las decisiones acerca de las distintas alternativas, si es que existen.
• A ser considerada persona sana, facilitando su participación como protagonista de su propio parto.
• A un parto respetuoso de sus tiempos biológico y psicológico, evitando prácticas invasivas y suministro de medicación no justificado.
• A ser informada sobre la evolución de su parto, el estado de su bebé y ser partícipe de las diferentes actuaciones del equipo médico.
• A no ser sometida a ningún examen o intervención cuyo propósito sea de investigación.
• A elegir quién la acompañe durante el trabajo de parto, parto y postparto.
• A tener a su lado a su bebé durante la permanencia en el establecimiento sanitario, siempre que el recién nacido no requiera de cuidados especiales.
• A ser informada, desde el embarazo, sobre los beneficios de la lactancia materna y recibir apoyo para amamantar.

Toda persona recién nacida tiene derecho:

• A ser tratada en forma respetuosa y digna.
• A su inequívoca identificación.
• A no ser sometida a ningún examen o intervención cuyo propósito sea de investigación o docencia.
• A la internación conjunta con su madre.
• A que su madre y padre reciban asesoramiento e información adecuada sobre los cuidados para su crecimiento y desarrollo, así como de su plan de vacunación.

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