La SENAF presentó el primer Consejo Consultivo de Adolescentes
Se trata de un espacio integrado por chicos y chicas de todas las provincias que promueve los derechos a la participación, a opinar y ser oídos y fortalece el ejercicio de la ciudadanía activa de adolescentes de entre 13 y 17 años.
La Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, conformó el primer Consejo Consultivo de Adolescentes con integrantes de todo el país, 32 titulares y 16 suplentes.
El Consejo Consultivo de Adolescente es un espacio institucional de participación, consulta y diálogo intergeneracional creado para que chicas y chicos de 13 a 17 años hagan oír su voz, opinen e incidan en las políticas públicas y los temas que les involucran. Esta propuesta se puso en marcha a través de la Dirección Nacional de Sistemas de Protección, en diciembre del año pasado, y el jueves 8 de abril se realizó la primera sesión y la presentación de las consejeras y los consejeros que inician su mandato en este espacio, en el marco de un encuentro que se transmitió en vivo por el canal de Youtube del organismo.
"Nuestro país reconoce el derecho de niños, niñas y adolescentes a incidir en todos los asuntos que son de su interés. Ellas y ellos hacen sentir su voz en muchos ámbitos, pero hay una brecha entre esas manifestaciones y su capacidad de incidir en las políticas públicas. Desde la SENAF, entendemos que es una obligación de los organismos de gobierno generar canales para que las políticas públicas se nutran de los deseos, miradas, sentires y demandas de niñas, niños y adolescentes, como un insumo ineludible” afirmó el Secretario Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, Gabriel Lerner. Y agregó: “Este Consejo será un mecanismo por el cual nos puedan dar a conocer sus puntos de vista respecto de lo que hacemos, de cómo lo hacemos y de lo que entienden que debemos hacer para enriquecer las políticas públicas".
Esta primera conformación del Consejo fue propuesta por un comité de chicos y chicas de organizaciones de todo el país, que eligió a sus pares, el primer grupo de consejeros y consejeras. Para ello, se consideraron los criterios de representación y diversidad que establece el Reglamento, tomando en cuenta que hubiera adolescentes de todas las provincias, con diversidades de géneros, de pueblos originarios, con discapacidad, sin cuidados parentales, de dispositivos penales, de centros de estudiantes, entre otros espacios.
“Promover y garantizar la participación de chicos y chicas requiere intervenciones activas del Estado, especialmente porque se trata de generar espacios nuevos, donde les adolescentes comprendan, desde la propia práctica, que su participación puede cambiar realidades, porque es un ejercicio de ciudadanía”, dijo Mariana Melgarejo, directora nacional de Sistemas de Protección, y añadió: “este aporte de les adolescentes es una experiencia importante para elles pero también para funcionarios, funcionarias y áreas de Estado. Incorporar, como práctica habitual, la escucha y el diálogo con chicos y chicas representa un gran desafío para adultos y adolescentes, quienes, sin dudas, tienen mucho para decir, compartir y aportar”.
Una de las nuevas consejeras, Lourdes María Chalfón, de la provincia de Tucumán, destacó de la iniciativa: “tener el lugar y la posibilidad para hacerse cargo de acciones políticas como la ciudadana en formación que soy hoy, como parte de un colectivo de agentes críticos de cambio. Las y los adolescentes no sólo somos el futuro, somos el presente y necesitamos escribir nuestra historia, ahora, ya, con nuestra mirada y nuestra experiencia”, expresó. En tanto, la consejera Carolina Bustamente Meza, de la provincia de La Pampa, agregó: “También para crear propuestas concretas con las temáticas que nos atraviesan y de esa forma mejorar nuestra situación actual”.
Durante su año de mandato, las consejeras y los consejeros tendrán la responsabilidad de representar inquietudes, intereses, demandas y propuestas de las y los adolescentes de todo el territorio argentino. Y opinar sobre los programas y las políticas públicas para las infancias y adolescencias y los temas que les involucren.