“Mujeres en el Sistema Universitario Argentino. 2018-2019” es un relevamiento sobre la situación actual de las mujeres en las universidades, que incluye desde la cantidad de estudiantes y egresadas anuales hasta el porcentaje que participa de cargos superiores.

Las estadísticas surgen de sondeos realizados por el Departamento de Información Universitaria de la SPU sobre datos que cargan las propias universidades a través de las plataformas SIU.

“Creemos que la difusión de este informe, con sus cifras e indicadores actualizados al período 2018-2019, nos permitirá trabajar con datos precisos y contundentes para saldar las desigualdades que aún conserva nuestro sistema universitario en materia de igualdad de género” detalló el Secretario de Políticas Universitarias Lic. Jaime Perczyk.

Datos relevantes

Del informe surge que hoy las mujeres superan en más del 10% a los varones tanto en cantidad de estudiantes como de egresadas. Ellas comprenden el 58,1% del alumnado y el 61,2% de los egresados. Sin embargo, a la hora de analizar su incidencia en altos mandos, ese porcentaje decrece abruptamente. Entre el grupo de rectores, por ejemplo, solo el 13% de los cargos está ocupado por mujeres.

Otro dato interesante en esta línea es que la cantidad de mujeres supera a los varones en casi todas las ramas de conocimiento. Las disparidades más grandes las encontramos en las ramas de la Salud, en las que las estudiantes femeninas representan el 73% del total, y las Humanas, donde el 70,3% de los alumnos son mujeres. La excepción la encontramos en las Ciencias Aplicadas, con sólo un 36% de ellas que se inclinan por esta rama.

En cuanto a la distribución por regiones el panorama es similar: ellas son mayoría en todas. Aunque vale hacer una salvedad: en la región Sur es donde más egresadas mujeres hay (65%) mientras que en la región Bonaerense ese porcentaje cae por más de seis puntos. Así y todo, ellas siguen siendo más: el 58,5% del total.

En el apartado que analiza los recursos humanos de las universidades argentinas, encontramos que en los cargos docentes la paridad de género parece cumplirse: el 50,05% son hombres mientras que el 49.95% son mujeres. Sin embargo, a medida que se avanza en cargos superiores, esta paridad disminuye, llegando a la máxima brecha de género en el mayor de los mandos universitarios: el de rector, en el que, como se mencionó, son un 13 por cierto está ejercido por mujeres. Es un desafío que nos queda por delante reducir esta brecha para igualar oportunidades.