Jornadas de Trauma y Medicina Táctica
La Dirección General de Salud del Ejército Argentino, a través de su Departamento de Educación, desarrolló las Jornadas de Trauma y Medicina Táctica, en las instalaciones del Centro Argentino de Entrenamiento Conjunto para Operaciones de Paz (CAECOPAZ).
La guerra, con el enorme potencial de daño que representan para el ser humano las armas modernas, genera en la Sanidad Militar un permanente desafío que pone en juego toda nuestra capacidad de respuesta: el propósito es atender al camarada herido en tiempo y forma.
Para brindar esa atención, será necesario rescatarlo de la zona de combate, evacuarlo a un lugar seguro donde se apliquen maniobras que permitan salvarle la vida, mitigar su dolor y curar sus heridas.
Las lesiones producidas en un conflicto armado tienen mucho en común con aquellas que se observan en eventos que ocasionan víctimas múltiples, tales como accidentes, terremotos, incendios, entre otros.
Aún así, hay un rasgo distintivo que las diferencia taxativamente: la acción del enemigo. En el campo de batalla, no habrá "áreas de seguridad resguardadas por la policía”, o rescatistas que ingresen en la zona de impacto cuando esta sea "segura". Los equipos sanitarios entran en la zona de guerra con la misión de salvar vidas y, a la vez, deben proteger la suya.
En esa línea conceptual, se realizaron las mencionadas jornadas, con una orientación teórico práctica, y con el objetivo de capacitar a médicos, enfermeros generales y profesionales del sistema de salud del Ejército Argentino en técnicas de medicina de combate. Las actividades se desarrollaron entre los días 21 y 22 de noviembre, y fueron inauguradas por el director general de Salud, general de brigada Pedro Javier Abregú.
Como autoridades de las jornadas se desempeñaron el coronel médico VGM Rubén Juan Cucchiara (secretario) y el mayor médico Daniel Lovito (coordinador científico y disertante).
La finalidad propuesta fue brindar los conocimientos necesarios para que el personal de Sanidad actúe en situaciones que impliquen la atención inicial y el traslado del herido dentro de un entorno táctico.
El coronel médico VGM Cucchiara orientó a los cursantes sobre la importancia de esta nueva disciplina médica, a partir de su experiencia como médico militar durante la Guerra de Malvinas.
En la fase práctica, se estableció la meta didáctica de instruir sobre la organización y el despliegue operativo del equipo de Sanidad durante un incidente con víctimas múltiples.
Primera jornada: Medicina táctica
El primer día, se desarrollaron temas teóricos, para ser puestos en práctica en el ejercicio integrador de la segunda jornada. Estos temas fueron:
- Objetivos y fases de la atención inicial del cuidado del herido en un entorno táctico y de combate.
- Manejo inicial de la escena en un Incidente con Múltiples Víctimas (IMV/triage).
- Evacuación sanitaria de combate.
Por la tarde, se organizaron grupos de instrucción práctica mediante distintas estaciones de destrezas.
El mayor médico Daniel Lovito, jefe de la División Capacitación del Departamento de Educación de la Dirección General de Salud, y médico especialista en Medicina de Emergencias, explicó: “La medicina táctica es una especialidad reciente y en desarrollo, que surge como respuesta a la proliferación de hechos traumáticos, tanto en un entorno urbano como en el campo de batalla”.
A través de la capacitación, se buscó que el cursante reconociese las situaciones que ponen en riesgo la vida de los pacientes, tales como heridas provocadas por armas de fuego o explosivos. La causa prevenible de muerte más abrumadora es la hemorragia en extremidad, junto con la dificultad respiratoria ocasionada por un neumotórax a tensión o una obstrucción de la vía aérea.
“
La medicina táctica tiene como objetivo tratar las bajas, prevenir más bajas y completar la misión.
”
mayor médico Daniel Lovito
Segunda jornada: Simulación de combate
En la segunda jornada, se llevó a cabo un ejercicio práctico integrador, en el que se simuló una situación de combate. En un ambiente bélico recreado, los equipos de camilleros rescataron heridos, los clasificaron según su gravedad y les aplicaron tratamientos simples para sostenerlos con vida, asegurándoles el traslado hasta el puesto de socorro.
Durante el ejercicio, un vehículo que transportaba personal del Ejército fue emboscado por una patrulla enemiga. Ante esa situación, se convocó al equipo de Sanidad, que asistió a las víctimas aplicando las tres fases de atención al herido en combate.
Luego, se evacuó a las víctimas a un puesto de socorro ubicado en la retaguardia, donde fueron reclasificadas de acuerdo con la gravedad de las lesiones y las probabilidades de sobrevivir. Finalmente, se las acondicionó para un eventual traslado a un escalón sanitario de mayor complejidad.
Por su parte, el suboficial principal enfermero (R) Aldo Gabriel Patroni se refirió a la relevancia de incorporar prácticas de tipo operacional a la sanidad militar: “Esta capacitación es muy importante, pues la medicina táctica estableció procedimientos sanitario asistenciales, que hoy son moneda corriente y que utilizan todas las Fuerzas Armadas y de Seguridad en el mundo. Estas técnicas permiten la recuperación, tratamiento y posterior evacuación a lugares de resolución definitiva para las víctimas o las bajas de combate. Es fundamental su conocimiento y su ejercitación”.
En síntesis, en los dos días, se abordaron técnicas de rescate y procedimientos de emergencia aplicables en el frente de combate. Si bien los equipos y materiales siempre serán escasos, la habilidad y destreza oportuna permitirán salvar la vida del camarada herido.
De esta manera, la Dirección General de Salud busca incrementar el nivel de conocimiento de nuestros equipos de salud. Durante las jornadas, se pudo percibir un alto grado de entusiasmo y compromiso por parte de los asistentes, quienes demostraron que, más allá de su profesión de soldados, reconocen la esencia de su actividad: dar lo mejor de sí para salvar la vida de un camarada, mitigar su dolor o, simplemente, “estar ahí” cuando más lo necesite.