En el Comando Conjunto Aeroespacial, Taiana supervisó las tareas del Sistema de vigilancia y control aéreo
El ministro de Defensa, Jorge Taiana, recorrió hoy las instalaciones del Comando Conjunto Aeroespacial en la localidad bonaerense de Merlo, con el fin de supervisar las tareas del Sistema de vigilancia y control aeroespacial, que concentra la información que otorgan los radares instalados en todo el país.
Durante su visita, el ministro observó el desempeño de los sensores de última generación desarrollados por INVAP. Entre ellos, los recientemente instalados en las ciudades de Villaguay, Entre Ríos, y de Río Grande, Tierra del Fuego, que forman parte del Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial (SINVICA).
“Quería venir acá para felicitarlos por la gran tarea que desarrollaron durante la cumbre de la Celac donde fueron los encargados de la vigilancia y control aéreo. En este Comando se trabaja los 365 días del año las 24 hs para proteger el espacio aéreo”, expresó el titular de la cartera.
“La tarea que se realiza acá es realmente muy importante, ya que se requiere un nivel de avanzada tecnología y capacitación profesional”, destacó Taiana.
Asimismo, al referirse al actual control aéreo, el ministro aseveró que “la Argentina está radarizada y el que diga lo contrario, está desinformado o miente voluntariamente.”
Y agregó: “Controlamos firmemente nuestro espacio aéreo y vamos a seguir avanzando, empezamos por el norte y ahora nos dirigimos hacia el sur, tenemos pendiente en este primer trimestre la inauguración de dos radares en la segunda línea, en Mercedes y en Tostado, para continuar con la radarización”, concluyó Taiana.
Por su parte, el comandante de Comando Conjunto Aeroespacial, brigadier Alejandro Bisso expresó: “Con este proceso de radarización, podemos decir que nuestro espacio aéreo está bastante bien controlado y vigilado, este centro reúne la información de todos los sectores del país, en coordinación también con las autoridades civiles y el SINVICA, que también trabajan junto con nosotros”.
El brigadier también destacó el trabajo en conjunto con INVAP: “Esta política, que afortunadamente seguimos adelante con la incorporación de los radares de industria nacional, es una cosa que nos facilita mucho cada vez que realizamos las tareas de mantenimiento, y si eventualmente hay algún problema, lo solucionamos inmediatamente", finalizó.
El titular de Defensa escuchó la exposición brindada por Bisso, acerca de los resultados del monitoreo efectuado por el radar instalado el mes pasado en la ciudad entrerriana de Villaguay, en el marco del programa SINVICA (Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial), diseñado en 2004. Gracias al mismo, hoy casi la totalidad del país se encuentra radarizado.
Como se informó, el pasado 15 de diciembre, cuando el ministro Taiana inauguró esta nueva estación de vigilancia aérea en Villaguay, el modelo RPA-170M, es un radar táctico de defensa aérea 3D de mediano alcance y de última generación.
Este radar, diseñado y fabricado íntegramente en San Carlos de Bariloche, por la empresa INVAP, es transportable y está proyectado para el despliegue rápido (movilización y puesta en funcionamiento en menos de 30 minutos) con mínima dotación de personal. Posee, además, un excelente desempeño en una amplia gama de escenarios operacionales, aún en las condiciones más adversas.
Luego, el ministro también asistió al monitoreo del Radar Primario Argentino (RPA) que fue desplegado en mayo último en la ciudad fueguina de Río Grande. Su ingeniería de base es similar a la primera serie de estos radares, aunque se implementaron mejoras para prevenir fallas, facilitar el mantenimiento y la operación, y aumentar la capacidad de adquisición y seguimiento de blancos.
Se trata de un sistema de vigilancia aeroespacial fijo que opera en banda L (entre 1 y 2 GigaHertz) con un alcance aproximado de 440 kilómetros.
Estos radares están a cargo del Comando Conjunto Aeroespacial, cuya misión es vigilar en forma permanente el espacio aéreo argentino. Para esa tarea se utilizan sistemas de vigilancia aérea de distinta performance que fueron desarrollados por el INVAP. La red se complementa con las unidades instaladas en los puestos de observación pertenecientes a la Agrupación de Vigilancia del Ejército Argentino.
Asimismo, todo buque de la Armada Argentina que por sus capacidades o área de patrullaje sea puesto bajo el control operacional del Comando Conjunto Aeroespacial se suma al sistema de vigilancia aérea favoreciendo de esa manera el trabajo conjunto.
Todas esas capacidades integradas le permiten al Centro de Operaciones Aeroespaciales, transformarse en el lugar neurálgico donde se conducen las operaciones de defensa aérea, y se verifica que el tráfico que circula en el ámbito de jurisdicción nacional respete la normativa vigente. Aquella aeronave que no cumpla el protocolo establecido adquiere la condición de Tránsito Aéreo Irregular (TAI).
Estuvieron presentes, el jefe de Gabinete, Héctor Mazzei, el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, teniente general Juan Martín Paleo; de la Fuerza Aérea, brigadier general Xavier Julián Isaac y el comandante Operacional del EMCO, comandante Operacional de las Fuerzas Armadas, general de Brigada Jorge Fabián Berredo, entre otros invitados civiles y militares.
La creación del Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial (SINVICA)
En 2003 se generó el primer contrato entre la Fuerza Aérea e INVAP pero el hecho constitutivo de su desarrollo como política estatal se materializó en el Decreto (N° 1407/2004) firmado por el presidente Néstor Kirchner, que creó el Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial (SINVICA), con el propósito de permitir, a través de la Fuerza Aérea, efectuar el control de todos los movimientos en el espacio aéreo de jurisdicción nacional.
En 2007 se aprobó el contrato para el prototipo de un radar primario de uso militar, mientras que en el 2011 se ejecutó el primer contrato para la fabricación en INVAP de radares militares de última tecnología.
De esta forma, Argentina se transformó en uno de los 15 países que disponen de tecnología propia para el desarrollo y producción de diferentes tipos de radares: secundarios de empleo civil, meteorológicos, de apertura sintética y primarios tridimensionales de medio y largo alcance militar.
En marzo de 2021 se firmó con INVAP un nuevo contrato para la fabricación de cinco radares primarios y la construcción de estaciones de vigilancia fijas para optimizar su funcionamiento.
Esta alianza estratégica con INVAP ha permitido diseñar, desarrollar, fabricar, proveer e instalar radares de tres dimensiones de uso militar de la más alta tecnología en nuestro país, contribuyendo a la misión de la Fuerza Aérea y la Defensa Nacional.
El desarrollo de estos radares tiene una enorme importancia para la industria nacional con base tecnológica, ya que la fabricación de estos sistemas de vigilancia aérea genera un encadenamiento productivo con Pymes nacionales y un círculo virtuoso entre profesionales e investigadores civiles y de las Fuerzas Armadas.