En defensa de la salud de los consumidores el Senasa intervino mercadería
Se trata de alimentos que eran transportados con distintas irregularidades. De acuerdo a las infracciones se realizaron decomisos y retornos a origen en la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica.
General Roca (Río Negro) – El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) realizó distintas acciones tendientes a proteger la salud de los consumidores a partir de los controles que implementa la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica.
Ayer, en el Puesto Puente Dique Catriel se decomisaron 93 kilogramos de carne bovina con hueso que eran transportados de manera oculta y sin refrigerar en una camioneta que se dirigía desde la localidad de 25 de Mayo, en La Pampa, hacia Catriel, provincia de Río Negro. A dichas irregularidades se suma la prohibición de ingreso a la región de productos que pueden vehiculizar la fiebre aftosa, como es el caso de la carne con hueso.
Por otra parte, desde el Puesto ubicado en Pradere, provincia de Buenos Aires, agentes de la barrera instruyeron el retorno a origen de un transporte en el que se llevaban 10.000 kilogramos de pollo que evidenciaban pérdida en la cadena de frío, con el riesgo que esto implica.
También en la provincia de Río Negro, y gracias al trabajo del personal del departamento de Abasto e Introducción de la Municipalidad de Cipolletti, se detectó el traslado irregular de 400 docenas de huevos que eran llevadas desde Río Negro hacia Neuquén sin la documentación sanitaria de respaldo necesaria.
El Senasa recuerda que el traslado de este tipo de mercadería sin las condiciones adecuadas ni la documentación que avale su origen representa un riesgo para el consumidor, ante la posibilidad de que contenga la bacteria salmonella, causante de enfermedades transmitidas por alimentos conocidas como intoxicaciones alimentarias.
El transporte en vehículos habilitados y la documentación sanitaria que acompaña a cada producto de origen animal y/o vegetal avala su aptitud para el consumo humano al declarar que ha sido elaborada, despachada y transportada con las condiciones higiénico-sanitarias adecuadas.
Con este tipo de acciones, el Senasa protege la salud de los consumidores, resguarda a los productores responsables y salvaguarda la sanidad animal y vegetal de la región patagónica.