Con la presencia de autoridades del Ministerio de Salud de la Nación, el Hospital de Pediatría “Juan P. Garrahan” celebró hoy sus 30 años con una serie de actividades de promoción de la salud frente al Obelisco, que incluyó la presentación del grupo de payasos de hospital Alegría Intensiva, un móvil de donación de sangre, juegos para transmitir la importancia de una alimentación saludable, toma de peso y talla e información sobre vacunación.

El ministro de Salud de la Nación, Jorge Lemus, quien se acercó a la celebración frente al Obelisco, subrayó que “estamos muy orgullosos de estos 30 primeros años de historia del Garrahan que lo convirtió en uno de los hospitales de excelencia de toda América Latina y es la cabecera de nuestra red de atención pediátrica”.

Por su parte, el presidente del Consejo de Administración del Hospital Garrahan, Carlos Kambourian, aseguró que “el festejo es una excusa para mostrarle a la gente que el hospital está presente, que sus puertas están abiertas para todos y que el trabajo que hace es fenomenal”.

Al comentar que mañana proseguirán los festejos en el hospital, Kambourian expresó que “el futuro del Garrahan es enorme y está planteado desde la innovación”. “La excelencia médica de este hospital es indiscutible, tenemos los mejores profesionales y la mejor tecnología puesta al servicio de la salud”, subrayó.

Durante la jornada, los profesionales a cargo del móvil para donar sangre del Ministerio de Salud de la Nación realizaron unas 23 extracciones destinadas al el Banco de Sangre del Hospital Garrahan que se abastece de sangre 100 por ciento voluntaria, es decir, donada sin ningún destinatario específico sino en forma solidaria para quien la necesita.

La jornada culminará a las 20 con la proyección sobre el Obelisco de un mapping en reconocimiento a los 30 años de trayectoria del hospital pediátrico ubicado en Parque Patricios.

Esta intervención artística, realizada en forma conjunta con Fundación Garrahan, fue concebida por Rafael Parra Toro, artista cinético e ingeniero venezolano-argentino, cuya producción se inscribe en la corriente del neo cinetismo digital. Su aporte al tradicional arte cinético está vinculado a la combinación de las formas del moiré y el uso de la programación computarizada.