La investigación comenzó hace un año, cuando dos ciberdelincuentes fueron identificados, un hombre y una mujer, que introducían dólares apócrifos en el país y los ponían en circulación. A partir de la captura de estas dos personas, nuestros agentes profundizaron las pesquisas, logrando establecer que detrás de ellos existía una compleja estructura criminal con roles específicos, diseñada para mantener activa la operación de esta banda de falsificación.

La modalidad delictiva que empleaban consistía en introducir los billetes falsos, de origen estadounidense, y distribuirlos en el mercado local mediante pasadores. Identificamos un total de 13 inmuebles vinculados a esta actividad ilegal, de los cuales diez se ubicaban en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los tres restantes en el Gran Buenos Aires, en los partidos de San Martín, Moreno y Merlo.

Con el respaldo de las pruebas, el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°1, a cargo de María Servini y bajo la Secretaría de Juan Miragaya, ordenó los allanamientos que resultaron en la detención de 11 personas: seis hombres y cinco mujeres. Durante los procedimientos, en los que también participó personal especializado de nuestra División Scopometría, decomisamos 33.500 dólares falsos, 30 mil pesos argentinos falsos, además de moneda extranjera de otros países, trece teléfonos celulares, una CPU, tarjetas de crédito y otros elementos clave para la investigación.

Cabe destacar que dos de los detenidos ya habían sido capturados en diciembre, pero fueron liberados. Sin embargo, nuestras investigaciones permitieron confirmar su rol fundamental en la operación de esta banda. Los once detenidos, entre los que se encuentran siete argentinos, dos peruanos y dos colombianos, quedaron a disposición de la jueza, junto con el material incautado.

Este operativo es un paso importante en nuestro objetivo de desarticular las redes del crimen organizado en nuestro país y de garantizar la seguridad de todos los argentinos.