Presidencia de la Nación

Conversatorio “La costura: historia argentina, historia de argentinas (y migrantes)” en el Museo Nacional de la Historia del Traje

Un encuentro, con entrada libre y gratuita, para revisar la historia y la situación actual del sector de la confección.

Este sábado 28 a las 16 h el Museo Nacional de la Historia del Traje (Chile 832, ciudad de Buenos Aires), conmemora el Día Mundial de la Costurera (que se celebra cada 14 de octubre), con el conversatorio La costura: historia argentina, historia de argentinas (y migrantes), a cargo de la docente, investigadora y escritora sobre moda y sostenibilidad Vicky Zaccari y la diseñadora y educadora Flor Dacal.

La actividad, que versará sobre la importancia de la organización y regulación laboral en el sector de la confección, y está destinada a trabajadoras textiles, diseñadores, funcionarios, productores, estudiantes y público en general interesado en conocer más sobre nuestro sector textil.

Victoria Zaccari es docente, investigadora y escritora sobre moda y sostenibilidad. Tesista de la especialización en Diseño Textil y de Indumentaria en FAUD-UNC. Su búsqueda para dar valor al trabajo de las costureras en Argentina la llevó a militar para que el sector textil y de la confección sean reconocidos como parte fundamental de nuestro desarrollo productivo y social.

En el conversatorio invitará a reflexionar acerca del momento histórico y actual del sector con preguntas como ¿Qué historias atraviesan al sector? ¿Cuáles son las leyes que regulan el trabajo en el sector de la confección? y temas como Diversificación y superexplotación laboral, ser migrante, género y tareas de cuidado y finalmente ¿Es posible configurar un sector textil que garantice los derechos de sus trabajadoras?.

La diseñadora explica el objetivo de la propuesta:

“Mi idea es generar un espacio para hablar sobre la industria textil y de indumentaria con trabajadoras del sector que tienen la particularidad de ser trabajadoras a domicilio. Muchas costureras producen para empresas, otras hacen arreglos o son modistas. La idea es hablar sobre el sector de la confección. Por otra parte Flor Dacal, que es más sastre, tiene un proyecto, que lleva adelante hace años y va a contar su experiencia. Se busca abrir el espacio para que otras costureras, que estén presentes ese día, puedan compartir sus experiencias, sus anécdotas, sus historias de vida. Darle visibilidad a un trabajo y a una profesión a la que generalmente, cuando hablamos de moda, no se le presta tanta atención o no se hace foco en el rol de las costureras como trabajadoras, como obreras de una industria. La charla va sobre qué leyes rigen el sector, sobre cómo fue cambiando la industria a través de los distintos momentos históricos y políticos de nuestro país, la importancia que tiene la industria para nuestro país, para la economía, para la sociedad y la importancia también de una política económica e industrial que le pueda prestar atención al sector textil como parte fundamental de la economía”.

En relación a la situación del sector textil, en estos momentos, Victoria señala:

“El sector textil, el sector de la confección, está compuesto en este momento, y desde hace varias décadas, por trabajadoras en talleres textiles que, muchos de ellos, se conocen como talleres clandestinos porque no cumplen con los requisitos de seguridad e higiene y/o registro laboral. Han sido noticia por siniestros, incendios o accidentes que se llevaron la vida de personas. Más allá de eso, también en el sector, hay algunos talleres registrados y que funcionan en condiciones y hay una buena cantidad de trabajadoras que trabajan en sus domicilios, porque eligen trabajar desde sus casas o porque vieron una salida laboral. A estas trabajadoras las rige la ley nº 12.713 de trabajo a domicilio, que fue sancionada en 1941. Desde ese momento no se tocó mucho la ley, sólo hubo algunas pequeñas reformas. En un momento se le prestó más atención y se hizo mucho más hincapié en la industria nacional, después, durante la dictadura, se abrieron las importaciones y se dejó de producir a nivel local. En los años 80 y 90 se siguió con esta apertura de importaciones pero ya con ropa traída de China, otra lógica a nivel mundial. Tenemos que pensar, a nivel sectorial, la importancia de la organización de las trabajadoras, que generalmente están en sus casas trabajando solas. Por eso es importante una organización colectiva para llevar adelante las demandas y conquistar los derechos, que hacen falta conquistar, para que la industria textil y de la confección sean más fuertes a nivel nacional, a nivel local desde una mirada nuestra, propia, no desde una mirada europea, como generalmente se suele mirar la moda, o copiando modelos que no son nuestros, no tienen que ver con nuestra historia, con nuestra estructura social ni con nuestra coyuntura o ubicación en el mundo. Se trata de eso, de construir mirando hacia adelante y pensando en un futuro común para todas y en un futuro mejor".

Florencia Dacal es diseñadora y educadora. Desarrolla proyectos culturales de reciclaje textil y cultura sustentable del vestir. Desde 2014 dirige Dacal, un emprendimiento de triple impacto. Colabora en múltiples proyectos con artistas, emprendedores, empresas, instituciones y espacios de cultura.

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