Con la presencia de Taiana, Filmus y Vizotti, representantes del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología se reunieron por primera vez en la Antártida
El ministro de Defensa, Jorge Taiana, junto con sus pares de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, y de Salud, Carla Vizzoti, encabezaron la sesión del Consejo Interinstitucional de Ciencia y Tecnología (CICyT) que se realizó por primera vez en la Base Marambio, en la Antártida.
“Argentina es un país bicontinental. Estar hoy aquí es muy importante porque estamos poniendo en el centro de la escena dos cuestiones que son centrales para la Argentina: la Antártida y la ciencia”, afirmó el titular de Defensa desde la Base Marambio.
Y continuó: “La Antártida es un centro de investigación científica de gran importancia para la Argentina, para la Humanidad, y por eso tenemos hoy acá en Marambio esta gran reunión del Consejo Interinstitucional de Ciencia y Tecnología”, afirmó Taiana, y agregó: “Es un evento histórico que muestra que la ciencia es una prioridad para el país y también la importancia que la ciencia argentina le da a la Antártida. Son hechos muy significativos. Y por primera vez se da esta coordinación con todos los organismos científicos y tiene un valor extraordinario”.
“La ciencia es soberanía. No hay desarrollo posible en el Siglo XXI si no se hay un fuerte desarrollo científico tecnológico y de innovación que permita defender los derechos que queremos para todos”, aseguró.
“Desde el Ministerio de Defensa tenemos un doble rol para sostener la presencia argentina en la Antártida, uno de soporte logístico, de comunicaciones, de transporte; y un papel científico a través de organismos que dependen de nuestro Ministerio y que integran el CICyT. de los dieciocho de estos organismos estuvieron hoy reunidos en la Base Marambio y cuatro pertenecen a Defensa: el Servicio de Hidrografía Naval, el Instituto Geográfico Nacional, el Servicio Meteorológico Nacional y CITEDEF, el órgano científico de las Fuerzas Armadas”, expresó Taiana.
Por su parte el ministro Daniel Filmus aseguró: “Los 17 organismos que conforman al CICYT defienden la ciencia y la tecnología del país con un sentido federal. Las investigadoras e investigadores que trabajan en Marambio tienen trabajos realizados en la Antártida para consolidar la soberanía argentina, para defender el medio ambiente, para poder cuidar las riquezas naturales. Argentina es un país bicontinental, y hoy también reafirmamos el bicontinentalismo. Defendemos la soberanía de las Islas Malvinas, que están muy cerca de la base, y al mismo tiempo apoyamos a la comunidad científica”.
Y continuó: “Hoy hemos anunciado inversiones aquí por más de 1.000 millones de pesos, que incluyen la construcción de tres nuevos laboratorios. Argentina es el país que en 1904 fundó la primera base antártica de investigación científica, con foco en meteorología. Con tres nuevos institutos estamos creando el Centro Interinstitucional en Temas Estratégicos Antárticos y Subantárticos (CITEAS) en Tierra del Fuego, que va a ser muy importante y tendrá la participación de la regional local de la UTN y de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego; así como también estamos impulsando expediciones para defender las especies marinas de la zona”.
Para finalizar, Filmus destacó que nuestro país “es fundador del Tratado Antártico. Es el país que tiene más bases, más antigüedad en el sector y mayor investigación. No hay peligro de que el tratado se venza. El tratado resguarda en un artículo especial las demandas de soberanía que tiene cada uno de los países firmantes. Somos muy respetuosos de eso y lo que plantea el tratado es que la Antártida es zona de paz y de investigación. Eso es lo que defiende Argentina en esta región”.
Este encuentro es un hecho histórico que reivindica además la soberanía sobre el denominado “Sector Antártico Argentino'', que está fundamentada entre otros argumentos, en el desarrollo de actividad científica nacional durante más de un siglo. El mismo forma parte del territorio de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, sujeto al régimen del Tratado Antártico, firmado en 1959.
Con esta premisa, el Ministerio de Defensa mediante la dirección del Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR), dependiente del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, lleva a cabo la Campaña Antártica de Verano, cuyo objetivo es el de abastecer a las bases argentinas y brindar apoyo logístico a las actividades científicas que se desarrollan en el continente blanco.
Para esta pericia, la cartera despliega sus medios fluviales y aéreos, transportando combustible, alimentos y materiales a las diferentes bases temporales y permanentes y se encarga de la recolección de residuos. Además, lleva adelante el traslado del personal civil y militar de las diferentes fuerzas que desarrollan tareas científicas y de logística durante todo el año.
El CICyT es el principal organismo de coordinación del sistema de Ciencia y Tecnología con el que cuenta el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y está conformado por los presidentes de los diferentes organismos nacionales de CyT y por un representante de las universidades por cada una de las siete regiones en las que el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) estructura su actuación, y otro por el Consejo de Rectores de Universidades Privadas (CRUP).
Participaron también la secretaria Legal y Técnica de la presidencia, Vila Ibarra; el jefe de Gabinete de la cartera castrense, Héctor Mazzei; la secretaria de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa, Daniela Castro; el secretario del Interior, José Lepere; el secretario de Articulación Científico Tecnológica, Juan Pablo Paz; el subsecretario de Coordinación Institucional, Pablo Nuñez; el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, teniente General Juan Martín Paleo; el comandante Conjunto Antártico, general de Brigada Edgar Calandin: junto a rectores de Universidades y representantes de organismos del CICyT.
Los organismos que lo integran son: CONICET, CNEA, CONAE, ANLIS, APN, BNDG, CIN, CITEDEF, CRUP, IAA, IGN, INA, INIDEP, INPRES, INTA, INTI, MINDEF, SEGEMAR, SHN, SMN.
Base Marambio
Es una de las siete permanentes que tiene nuestro país en el continente blanco. Es de tipo conjunta, bajo la administración del Comando Conjunto Antártico, dependiente del Ministerio de Defensa. Actualmente su jefe es el vicecomodoro Ernesto Rafael Lynch.
Ubicada en la Isla Marambio (ex Seymur) sobre el Mar de Weddell, su nombre es en honor al vicecomodoro Gustavo Marambio, pionero de la Fuerza Aérea Argentina.
De gran valor estratégico para las tareas científicas que allí se desarrollan, es la única base argentina con pista de aterrizaje para aviones de transporte de carga y pasajeros. Esto permite el abastecimiento logístico propio y para otras bases nacionales y extranjeras, la distribución del personal, correo, evacuación aeromédica, búsqueda y salvamento.
Más de un siglo de presencia argentina en la Antártida
La presencia argentina en la Antártida se remonta al 22 de febrero de 1904, cuando se instaló el Observatorio Meteorológico Antártico Argentino en el archipiélago de las islas Orcadas del Sur. Desde entonces, el Sector Antártico Argentino trabajó de forma ininterrumpida, dando inicio así a una prolífica historia de aportes científicos y de consolidación soberana.
Esta se fortaleció en 1951 con la creación del Instituto Antártico Argentino, tras un decreto firmado por el entonces presidente Juan Domingo Perón, y el posterior establecimiento de la Dirección Nacional del Antártico en 1969.
Hasta el año 1944 nuestro país fue el único ocupante permanente de la Antártida y uno de los 12 países signatarios del Tratado Antártico suscripto en 1959. A su vez, la Argentina fue firmante de la prórroga conocida como "Protocolo de Madrid", en 1991, que prohíbe, por un periodo de 50 años, la explotación de recursos naturales no renovables e insta a la preservación del medio ambiente.
El país cuenta - ahora con la recuperación de la Base Petrel- con siete bases permanentes y seis de actividad temporaria. Las primeras, cada una con una dotación que varía y es fluctuante anualmente, son: Marambio, Orcadas, Carlini, Esperanza, San Martín, Petrel, y la más austral, Belgrano II.
Las de actividad temporaria son: Brown, Matienzo, Primavera, Cámara, Melchior y Decepción. En estas bases transitorias se realizan tareas de mantenimiento de las instalaciones y acopio de datos requeridos por la Dirección Nacional Antártica en apoyo a las actividades científicas.
Todas las bases antárticas y refugios son gestionadas en conjunto entre las distintas Fuerzas Armadas y la Dirección Nacional del Antártico, con el fin de optimizar los recursos, y dependen orgánicamente del Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR).
La tarea principal está relacionada a las investigaciones científicas, en tanto que las tareas secundarias, son logísticas y técnicas, mantenimiento de las instalaciones e infraestructura, prestar servicios de apoyo a expediciones de otras bases, buques y aeronaves, como también el mantenimiento de los refugios.
El sostenimiento de las bases permanentes en la Antártida constituye una política de Estado de la República Argentina.