El Instituto Gulich, perteneciente a la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y a la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), llevó a cabo la octava edición de la Escuela de Primavera, del 14 al 18 de octubre de 2024 en el Centro Espacial Teófilo Tabanera, en Falda del Cañete, provincia de Córdoba. Fue organizada conjuntamente por la CONAE, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Sociedad de Geociencia y Percepción Remota (GRSS, por sus siglas en inglés), del Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE).

Participaron de manera presencial 50 profesionales, 35 de Argentina y 15 de otros países de América Latina, como México, Colombia, Chile, Venezuela, Perú y Bolivia. La Escuela de Primavera se realiza anualmente desde 2016, con la excepción de 2020 debido a la pandemia de COVID-19. En 2024 celebró su octava edición y se enmarcó en la iniciativa PUMAS (Promoción de la Utilización y Aplicaciones de Misión y Ciencia), cogestionada entre la ESA y la CONAE, con el objetivo de promover el desarrollo de aplicaciones científicas y tecnológicas basadas en productos satelitales de las misiones SAOCOM y Sentinel-1.

Cuerpo docente internacional

Se destacó la presencia de especialistas nacionales e internacionales, provenientes de Argentina, Italia, Polonia, España y Francia, como el Dr. Francesco Sarti, coordinador científico de las Actividades de Educación y Formación de la ESA; la Dra. Magdalena Fitrzyk, científica de Proyectos de Teledetección para la ESA; el Dr. Armando Marino, profesor asociado en la Universidad de Stirling, Reino Unido; el Dr. Carlos López-Martínez, profesor en la Universitat Politècnica de Catalunya, España; y el Dr. Leonardo Euillades, de la Universidad Nacional de Cuyo, Argentina. Ofrecieron una formación integral sobre técnicas avanzadas de radar para el monitoreo de la Tierra, permitiendo a quienes asistieron aplicar sus conocimientos en situaciones prácticas.

El Dr. Santiago Seppi, investigador y docente en el Instituto Gulich, destacó la importancia de esta edición por contar con referentes internacionales como Armando Marino y Carlos López-Martínez, quienes dieron sus clases en español: "Es muy difícil encontrar capacitaciones avanzadas de este nivel en español. No solo compartieron sus conocimientos, sino que también estuvieron abiertos a consultas, lo que generó un espacio de intercambio muy valioso".

Formación avanzada en tecnologías SAR

La Escuela se enfocó en el uso de radares de apertura sintética (SAR, por su siglas en inglés), con especial énfasis en las misiones SAOCOM y Sentinel-1. Durante el encuentro, se abordaron técnicas como polarimetría, interferometría y polarimetría interferométrica. El Dr. Seppi explicó que "estas técnicas permiten extraer información clave de la superficie terrestre, como la altura de los árboles y las distancias entre el suelo y las copas de los árboles, lo cual es especialmente útil en aplicaciones forestales. También sirven para caracterizar la topografía e incluso identificar deformaciones en la superficie, como lo hace la interferometría". Las jornadas combinaron teoría y práctica, lo que permitió aplicar estos conocimientos en estudios reales sobre recursos forestales y monitoreo de la Tierra.

Una experiencia de cooperación regional

Además de la formación técnica, la Escuela de Primavera fomenta la cooperación entre países de América Latina y Europa. Seppi destacó que "este tipo de eventos no solo contribuyen a la formación de nuevas generaciones de profesionales, sino que también fortalecen los vínculos entre instituciones y fomentan la colaboración internacional, lo que es fundamental para avanzar en el desarrollo de aplicaciones basadas en datos satelitales".

La edición 2024 reafirmó el compromiso de la CONAE, la ESA y sus socios en la promoción de tecnologías espaciales para preservar los recursos naturales y llevar a cabo un monitoreo ambiental efectivo. Esta experiencia permitió que jóvenes profesionales de la región accedieran a conocimientos de alto nivel sin necesidad de trasladarse fuera de América Latina.