En esta jornada, especialistas en patologías del cultivo, saneamiento, diagnóstico y multiplicación de material genético libre de virus del Centro de Investigaciones Agropecuarias (CIAP) del INTA capacitaron a los productores y técnicos en manejo de material de propagación obtenido por cultivo in vitro de meristemas con termoterapia previa, y describieron las características de las principales variedades de la colección de genotipos logradas en el Instituto de Patología Vegetal "Ing. Agr. Sergio Fernando Nome" (IPAVE), cuya importancia a nivel regional es relevante.

Desde estas Unidades de Investigación del INTA se busca llegar con la producción de plantines con sanidad controlada a productores que quieran desarrollar el cultivo reduciendo riesgos económicos, al haberse reportado en ocasiones mermas en la producción de raíces tuberosas superiores al 90% por infecciones virales transmitidas por vectores. Córdoba es una de las principales zonas de producción de batata, junto con San Pedro (Buenos Aires), a los que le siguen el NOA y el NEA. En los últimos años la obtención de nuevas variedades comerciales con mejores características organolépticas y nutricionales, y la propia versatilidad de esta hortícola para la industria, ha hecho crecer su potencial productivo en el territorio cordobés.

Para ello, no sólo se brindó esta capacitación, sino que desde la Estación Experimental Agropecuaria Manfredi y su Agencia de Extensión Rural Oncativo, junto con técnicos del CIAP y de la MESA, se acompañó en la construcción de un “Módulo de multiplicación de plantas de batata con sanidad controlada”, adquiriendo 5 variedades de importancia económica, con diferentes ciclos y color de piel y pulpa, para la obtención de material vegetal e introducción de la producción comercial de esta hortaliza en la zona.

Se estableció un invernadero protegido con mallas antiáfidos con la capacidad de albergar 150 plantas madres de 5 cultivares distintos, con una producción estimada por superficie de 175 guías/m2. Este módulo será manejado por el grupo de productores con el acompañamiento técnico del INTA, donde evaluarán las variedades seleccionadas en desarrollo fenológico y productividad, generando información útil para demás productores hortícolas.
Ello permitirá introducir en la zona nuevos cultivos, potenciar las estrategias de adaptación a eventos climáticos extremos, mejorar la rentabilidad predial y, a nivel local, fortalecer la red comercial y el consumo de un producto con excelente calidad nutricional.

La promoción del cultivo de batata en esta región resulta una estrategia pensada como medida de resiliencia y adaptación, teniendo en cuenta el conocimiento generado en la institución científica, el material vegetal logrado y la capacidad operativa del organismo para generar módulos de multiplicación local en la red socio-técnica.

En la Región Alimentaria de Córdoba, y específicamente en el cinturón hortícola de Pilar y Río Segundo, desde hace 4 años se viene trabajando en una red socio-técnica (denominada Mesa Agroclimática y Ambiental de Pilar - Río Segundo), con estrategias de adaptación a eventos meteorológicos extremos causantes de importantes pérdidas económicas; donde INTA es integrante de esta Mesa junto con otros organismos locales, provinciales y nacionales. En el diseño de estrategias de adaptación, se trabajó con la selección de cultivos de menor sensibilidad a estos eventos, destacándose las hortalizas de raíz y algunas de fruto.